El negocio del fútbol en menores de edad que apuntan a llegar a lo más alto se convierte en un problema en el Athletic
Que el mundo del fútbol mueve mucho dinero y siempre tiene alrededor a gente que trata de llevarse una pieza del pastel no es algo nuevo. El problema, cada vez más generalizado, son los que buscan esa rentabilidad explotando el talento de niños que aspiran a ser futbolistas.
En esto, lógicamente, un club con la filosofía del Athletic tiene bastante ajetreo. Hay niños de 12 años, e incluso menos, que ya tienen agente, y son este tipo de agentes los que aprietan al club y a las familias de los jugadores hasta límites tremendos.
Por eso hay quien pide al club que corte por lo sano. La manera de arreglar este problema que cada año se vuelve más incontrolable es la existencia de cuentas públicas, para que los socios sean conscientes de todos los movimientos y que ellos decidan de qué lado se ponen.