Su contrato le respalda y las decisiones del club le motivan
Increíble ver un tema como estos para el aficionado promedio del FC Barcelona sea hoy un punto de conversación. Perder a Leo Messi es el peor escenario posible, si además se tiene en cuenta el momento: segundos de LaLiga, fracaso en la Copa del Rey, y fracaso en la Supercopa de España. Pero es que el capitán lo tiene claro, si no le cumplen con lo estipulado se irá sin reparos y sin deudas pendientes a final de temporada.
El contrato que tiene vigente el capitán así lo respalda. En 2017, cuando llevaron a cabo su última extensión, se llegó al acuerdo de perderlo a final de temporada cuando él quisiera, y sin valores. Según Bartomeu es un premio a su esfuerzo y disciplina, y remató enviando los fantasmas al ostracismo al decir que no cree que lo haga.
Pero acá el tema es que se han roto las relaciones, al menos entre él y la secretaría técnica. Ha tenido que estar muy ofuscado para responder a las palabras de Abidal como lo ha hecho, y eso de por sí ya es un precedente muy diciente. Medir las consecuencias es algo que debe ser por parte de los más influyentes, y para Messi hace rato que las cosas no vienen bien.
Abidal no da tranquilidad a ninguno en Can Barça
La pulga ha realizado un análisis consciente y basado en hechos puntuales. El equipo ha perdido a 4 jugadores de la plantilla, y a 2 de la filial. En contraparte no se ha llevado a nadie y de acuerdo a las reacciones eso ha desatado la furia. Messi, dentro de sus exigencias ha dejado claro que necesita un equipo competitivo que le permita salir a flote con cada uno de los retos que afrontan en la temporada.
Para Abidal las decisiones han ido en contravía cada que debe gestionar. Eliminó del camino a Valverde cuando el mensaje era unidad, y ha dejado escapar los anhelos de su figura como pasó con Neymar. No ha sido capaz de conseguir un fichaje de pergaminos, y tan solo Griezmann alumbra en su oscuro presente.
Un baldado de agua fría, si Messi se va, al Barcelona le tendrá que pesar, al menos así lo deja ver la gente en las diferentes redes sociales. De parte de las directivas la invitación a estar tranquilos, Messi ama al Barcelona y solo se irá cuando sea su momento. Le han manoseado, le han sacado del estirpe a otros emblemas como Xavi e Iniesta, y por ahora no hay asomo de nada. Preocupante.