Un detalle entregado como parte de una estrategia ha dejado ver las intensiones que tienen en el cuerpo técnico con el croata
Luka Modric está viviendo una de sus últimas etapas como jugador del Real Madrid, eso nadie lo pone en duda. Y es que ha llevado una dilatada carrera en donde ha conquistado casi todo, menos la regularidad de una Liga que solo una vez ha logrado acariciar. Pues bien, ese termina siendo el mayor argumento de Zidane, que hasta acá trabaja de lleno por intentar posicionar el objetivo en darle una última alegría al pony.
La regularidad que están teniendo esta temporada los tiene como únicos líderes de la competición local, una que en los últimos 10 años solo han conquistado 2 veces, por 7 de su máximo rival, el FC Barcelona. Importante ver cómo han enfrentado el reto, y más al ver que se viene el clásico en el Bernabéu que a final de cuentas es el que define todo.
Pues bien, Zizou lo ha dejado claro una vez se puso otra vez al frente del equipo, quiere ganar LaLiga más que cualquier otro torneo, pues jugadores como Modric solo tiene uno, y eso es algo que no se explican cómo es. Despedirle con esa conquista sería un premio real a lo que ha entregado, y eso nadie se lo puede negar. vaya manera de decirle adiós.
Modric parece ya tener reemplazo
Son cosas que se planifican con tiempo, y él mismo lo sabe. En la actual plantilla se ha dejado comer la tostada de un Fede Valverde inspirado. El uruguayo viene rindiendo a un nivel excelente y eso se sale de cualquier discusión. Sin embargo, el mercado es inmenso y de todo lo que ha sonado en Concha Espina se queda con un jugador en específico.
Todo indica que una vez más saldrán a afrontar la contratación del holandés Donny Van de Beek. El jugador del Ajax es el que más se parece en características al ganador del Balón de oro anterior. Despliegue, doble función, buen manejo de pelota e inventiva. Todo lo que Modric catapultó años anteriores parece verse renovado en la sensación de Europa.
Muchos títulos internacionales, y apenas una Liga, un mensaje claro, le quieren despedir por lo grande, además porque la gente lo exige, la historia presiona y su entrenador está convencido. Acabar con la hegemonía de los culés es un objetivo sin atenuantes, nada parece ser más acertado que buscar avanzar construyendo, con una nueva conquista interna.