Al entrenador no le queda otra que tomar decisiones
Ya se dejó ver en el clásico, Mariano Díaz es uno de los grandes problemas identificados, y no es que sea por un hecho negativo, sino porque sus números juegan en contra de algunas percepciones. Para Zidane, entrenador del Real Madrid, Karim Benzema es el mejor del mundo en su posición, y sacarle es algo que no se plantea por nada. Bastaron 2 minutos para que el hispano dominicano le hiciera tomarse la cabeza y eso es algo que hoy rodea al mundo.
Solo le dio dos minutos, y lo que parecía un cambio estratégico que buscaba quemar minutos, terminó siendo la puntilla para hacerse con el juego más importante de la temporada. A los 52 segundos de haber ingresado anotó el segundo gol merengue, aseguró el clásico y le dio de paso el liderato a su equipo que ahora solo se centra en mantener la pequeña ventaja y en ir a Manchester en busca del milagro.
Fue su debut en Liga, pero ni eso ha tirado al traste sus promedios. Benzema que es el hombre gol lleva en sus registros un promedio de gol cada 167 minutos, mientras que Mariano lo hace cada 69. Ya eso es para un entrenador un tema a tratar con pinzas, pues con lo hecho en la Copa del Rey lo deja más que expuesto, 7 goles, impresionante.
Zidane y una disyuntiva enorme
Por promedios las cosas son muy claras, no hay quién supere a Mariano pese a no contar con el respaldo de su entrenador visto hasta ahora. Todo porque no se ha planteado jugar con dos delanteros definidos, y si metes a uno debes sacar al otro, nada acertado ese pensamiento de momento. El caso es que la duda ha quedado sembrada, sobre todo en situaciones donde se debe salir a atacar y a anotar.
Muy bien, ese cambio ha sido una solución, pero a la vez un problema, la gente pide más minutos para un jugador al que Zidane le tiene decididamente metido en la lista de futuribles. No le quería ver una temporada más allí y para eso había dispuesto de un gran músculo de apoyo centrado en la directiva.
Y si de requerimientos se trata estos han llegado, no solo de España sino de otras partes. Todos coinciden en que este delantero tiene mucho qué aportar en los proyectos, aunque a él le sigue gustando la idea de permanecer vestido de merengue. Zidane deberá afrontar este problema con madurez y quizás con mayor inteligencia que hasta ahora. Delante tiene compromisos de Liga en los que puede ir haciéndole ganar confianza. Veremos cómo procede.
