El ex presidente blanco falleció este sábado tras una dura lucha contra la enfermedad
Horribles noticias para la familia madridista con el fallecimiento de Lorenzo Sanz a los 76 años de edad. El que fuera presidente del Real Madrid durante los años 1995 y 2000 no pudo ganarle la batalla al coronavirus y tras ser ingresado el pasado martes en el hospital muy grave finalmente falleció este sábado.
Lorenzo Sanz ingresó de urgencia en el hospital tras ocho días con fiebre y tras realizarle las pruebas del Covid-19 dio positivo. Su hijo Fernando Sanz aseguró en su momento que su padre no quiso acudir antes a urgencias porque no quería saturar a los sanitarios con todo el trabajo que están teniendo estas semanas con la crisis del coronavirus.
Sanz llegó al Real Madrid en el año 1985 de la mano de Ramón Mendoza, al que precisamente sustituiría como presidente. En su primera temporada al frente del club blanco en la 1996-1997 reconquistó la Liga, pero su gran logró fue devolverle al Real Madrid la Copa de Europa 32 años después. Se produjo en el curso 1997-1998 con Jupp Heynckes a los mandos del equipo.
Pero ahí no se quedo la cosa y dos años después con un equipo renovado y con Vicente del Bosque al frente de la plantilla volvió a conquistar Europa. En esa ocasión lo hizo en París y ante otro club español como el Valencia CF, al que derrotó por un contundente 3-0 a pesar de que los ches eran favoritos para esta final.
Después de este acontecimiento Lorenzo Sanz optó por adelantar las elecciones a la presidencia del Real Madrid y fue entonces cuando cedió el trono a favor de Florentino Pérez. Después en 2004 volvería a intentarlo, pero ya no tuvo ninguna opción ante el actual presidente del club blanco.
Las reacciones al fallecimiento de Lorenzo Sanz no se han hecho esperar, desde jugadores de la actual plantilla del Real Madrid hasta los que hicieron historia con él en el club blanco. Una perdida dolorosa para todos los madridistas. Lo que es seguro es que cuando todo vuelva a la normalidad Sanz tendrá su merecido homenaje en un Santiago Bernabéu abarrotado.
