El director deportivo valora opciones tras salir del Marsella
Hace una semana Andoni Zubizarreta puso fin a cuatro años como director deportivo del Olympique de Marsella. Su trabajo allí no será recordado por los aficionados y ahora busca nuevos retos en su carrera. Su destino más probable Turquía, aunque tampoco hay que descartar la opción de un regreso al Athletic con el objetivo de apretar las tuercas a Rafa Alkorta, lo que puede dejar en mal lugar al presidente Aitor Elizegi.
Sería la segunda etapa de Zubizarreta en los despachos de San Mamés tras la primera entre los años 2001 y 2004. La realidad es que el trabajo de Alkorta hasta ahora está siendo puesto muy en duda. Ha cerrado renovaciones importantes, pero hay otros temas como el reciente de Unai Núñez que traen de cabeza al director deportivo.
Alkorta es una pieza básica en el proyecto de Aitor Elizegi, por lo que un regreso de Zubizarreta al equipo no supondría obligatoriamente su salida del club. De hecho, un tándem formado por los dos ex futbolistas puede ser una gran idea y que aumente el éxito del Athletic con algunas operaciones que hasta ahora se han complicado.
Más allá de retener a jugadores clave la afición está deseando presenciar por fin algún fichajes de primer nivel. Los nombres de Ander Herrera y Javi Martínez llevan años sobre la mesa del club, incluso el de Fernando Llorente. Sin embargo Alkorta no se ha movido por ninguno de ellos, algo que puede cambiar con Zubizarreta.
Porque si algo ha demostrado Zubizarreta en su etapa como director deportivo es que su forma de trabajar es muy agresiva, sin esperar a que las oportunidades le lleguen a él. Va con todo a por los objetivos que se marca y eso en el Athletic puede ser clave para afrontar ciertas operaciones por las que Alkorta no ha apostado.
Además otro punto a favor de Zubizarreta es que conoce a la perfección la forma en la que se trabaja en el Athletic, por lo que no tendría ningún problema de adaptación al club. Habrá que estar atentos a esta posibilidad, pero estando libre sería una insensatez que el Athletic no preguntara al menos por él.