El presidente de Cantabria estuvo en el programa de televisión para aclarar lo sucedido
Todo es mentira, es un programa que analiza todas las noticias falsas que inundan cada día las páginas de actualidad y donde hace poco, Risto Mejide le realizó una entrevista a Miguel Ángel Revilla, el presidente de Cantabria. Este acontecimiento ocurrió el pasado miércoles delante de muchos televidentes que presenciaron todo.
Precisamente político y presentador discutieron en directo este miércoles por la tarde después de que Revilla negara que él fuera el responsable de cerrar la hostelería de su Comunidad Autónoma y mantener el cierre interior de los locales esta Navidad. Sin duda, Risto ha vuelto a hacer gala de ser alguien que no se calla ante nada ni ante nadie.
La actitud de Miguel solo ha servido para demostrar sus contradicciones
Y es que el presentador no ha dudado en destapar a Revilla y dejarle en evidencia ante las continuas contradicciones que tuvo en su última aparición en el programa. “Ayer se produjo una situación muy desagradable para todos que no estaba prevista, además con una persona muy querida por el programa y por mí, personalmente”, se lamentaba.
Por otro lado, Mejide ha sostenido muy serio: “En la entrevista se dijeron cosas que sorprenden. Esto no solo a los vecinos de Cantabria, sorprenden a todo hijo de vecino. El Gobierno puede delegar las competencias en las Comunidades autónomas pero lo que no pueden hacer las Comunidades es decir que es un problema de los funcionarios”.
Las palabras de Risto a Revilla en Todo es mentira han demostrado su molestia con dicha situación
“¿Aquí quién asume responsabilidad política? ¿A quién debemos mirar los ciudadanos cuando se toman decisiones tan importantes? Por lo visto, nadie. Creo que en este momento, tan difícil para el país, tenemos que poder mirar a alguien a los ojos para decir que es su responsabilidad. Necesitamos que nuestros políticos asuman sus responsabilidades“, decía muy molesto.
Finalmente, terminaba asegurando Risto que se mostraba muy disgustado por lo que le había ocurrido con un político al que le tiene cariño como Revilla. “No asumir las responsabilidad política a estas alturas a mí me parece escandaloso y yo eso aquí en este plató no lo puedo permitir”.