Los campeones de Francia buscan hacer prevalecer una vez más su poder financiero para dejar sin una de sus estrellas al cuadro español
Todo ha iniciado por el desperdigo noticioso que ha soltado un prestigioso comunicador que cubre a la entidad de la capital. Al parecer, la destreza, el excelente comportamiento dentro de la cancha y las bondades habrían hecho que algunos gigantes como el PSG se pusieran en ruta de fichar a Marcos Llorente. Este mediocampista o delantero ocasional es uno de los jugadores con mayor proyección y eso queda demostrado.
A sus 26 años ha podido revalidar su carrera en una institución donde la han dado el valor que estaba necesitando. Aún hay gente que se lanza la misma pregunta, ¿Cómo fue el Real Madrid a soltar a semejante perla?. Es un jugador que cumple varias funciones, juega roles distintos y rellena diferentes posiciones dentro del campo. Todo lo que un entrenador de élite exige a sus más altos valores.
En el punto de mira los jefes del PSG ya se proyectan la salida favorable de Marcos Llorente
Cuando le ficharon pagaron 40 millones de euros, no jugaba y su espíritu era bajo. Hoy, es un tipo que cuesta 120 kilos, que viene en plena alza y que ha encontrado en el ‘Cholo’ un ejemplo que le brinda confianza. Por erso los más grandes se han dejado tentar, y le han puesto en primera plana. El PSG es uno de ellos, pues ha identificado muchas similitudes en el juego que proyecta allí Marco Verrati.
Hoy, consultados por este tema han decretado que su intensión es evidente, y que estarían dispuestos a llegar a cifras concretas por su fichaje. Saben que llegar a los 120 millones es un exabrupto, por el seguimiento del equilibrio financiero, pero entienden que un buen ofrecimiento debería ser suficiente para llegar al punto de equilibrio. Un total de 70 millones es a priori su primera oferta.
Simeone es el primero en lamentar la potencial salida de Llorente del equipo
Las expectativas a su llegada eran altas, pero la previsión de lo hecho de momento era todo lo contario. Eso se traduce en opciones limitadas, que han acabado elevándose tras el iluminado partido en Anfield, el paso al éxito del futbolista. Tras eso todo ha sido solvencia, alegría y comunión, que deja a Simeone en franca preocupación por lo que hoy representa.
El contrato del mediocampista finaliza en 2024, y se ha llegado a especular con una extensión anticipada. El jugador viene bien, es fundamental, se ha acomodado al nuevo dibujo del entrenador y aporta dos facetas, el de contención y el de ataque con dinámica e intensidad. Dos situaciones que se dejan caer por su propio peso y que están a la espera de una oficialización mediática.