La operadora intensifica su estrategia de acoso comercial ante el éxodo de clientes
Operadoras como Jazztel, que pierden muchísimo con el boca a boca, lanzan constantemente la clásica campaña de acoso telefónico. Basan su estrategia en la estadística, ya que entienden que de cada 100 clientes que acosen, 98 se van a quejar amargamente pero igual captan a 2.
En una medida recurrente de este tipo de operadores que presumen de ser baratos. El low cost está muy bien, cuando todo funciona. Pero ya se sabe que en compañías como Jazztel, en el momento que algo falla, llegan los problemas. Porque los técnicos nunca llegan, nadie atiende el teléfono…
Lo barato sale caro
Se llaman compañías low cost por algo. Lo barato al final siempre sale caro. Es como volar con Ryanair, que te permite viajar muy barato. Pero si hay un retraso o cualquier problema no te dan ni una sola facilidad. Al final para una mejor cobertura y servicio, otras compañías algo más caras, terminan siendo mejores.
Con Jazztel sucede algo similar. Su reputación baja por momentos. Si uno revisa las redes sociales, no hay día que no se quejen cientos de clientes por algún tipo de incidencia con la compañía que anuncia Jesús Vázquez. Y con el fin de compensar esta pérdida de reputación, cada vez lanzan campañas más agresivas.
Campaña de acoso de Jazztel
Da la sensación de que tienen como 30 números de teléfonos diferentes. Son capaces de llamar a un cliente todos los días durante semanas. A pesar de bloquear sus números, terminan llamando desde otro. Es la campaña de Jazztel de acoso total a potenciales clientes.
Luego piden disculpas a través de las redes, o aconsejan cómo evitar esas llamadas. Pero lo cierto es que llaman y llaman y llaman, con la esperanza de que uno de cada 100 contrate Jazztel. Un bucle muy peligroso que tiene cansados a la mayor parte de la población.