Desde el entrenador hasta sus jugadores han admitido estar 100% concentrados para evitar entrar en el ritmo que van a imponer los andaluces
Las dos derrotas al hilo del Sevilla FC han sido lo suficientemente impactantes para el grupo orientado por Julen Lopetegui, que han encendido las alarmas ahora que deben visitar a Elche siguiendo el protocolo de un partido pendiente. Desde luego que para los ilicitanos esto es un evento a tener en cuenta. Pues a un grupo herido y con calidad habrá que planificarle una buena estrategia de resistencia en palabras de su entrenador.
Desde la llegada de Fran Escribá las sensaciones han sido buenas. De hecho el grupo ha mejorado y más allá de las dos derrotas, se sabe que pueden abrir una buena contienda si llegan en estado óptimo. Vienen trabajando en la recuperación de elementos de vital importancia, y en ajustar conceptos para hacer prevalecer su estabilidad defensiva. Su ubicación en la tabla les forza, y el hecho de tener que enfrentarlos de nuevo les motiva.
Dos caídas marcan la tensión en el Elche-Sevilla de mañana
Por los lados del Sevilla venían de seis triunfos al hilo en la competencia, situación que les ha puesto en zona de privilegio con cupo asegurado a Champions de momento. El colchón con respecto al quinto clasificado es importante lo que le da un toque de respiro. Pero lo grave de esta situación es la imagen brindada, han recibido 5 goles y no han anotado uno solo, los dos choques ante el FC Barcelona.
Primero fue por Liga y después por Copa, de hecho esta última presentación tiró por bajo su resultado del partido inicial que había sido de 2-0. Las dudas defensivas han aparecido, y el fantasma de Champions parece seguir presente. Esto ha hecho que se tomen algunas medidas y entero el grupo esté pensando en no más que sacar los puntos adelante.
Dudas en las plantillas enmarcan la previa de este importante compromiso
Ahora bien, ya analizando los grupos que van a desplazarse hasta el Martínez Valero hay que decir que tendrán algunos cambios. Por los lados del Elche recuperan a Josan Fernández y a Johan Mojica, ambos lesionados y apartados de los últimos partidos. Emiliano Rigoni ha quedado descartado de toda posibilidad y la idea es mantener la base. El ataque estará conformado por Guido Carrillo y Lucas Boyé, además de Josan y Fidel a las bandas.
Mientras en Sevilla podrían aparecer de nuevo los argentinos Lucas Ocampos y Marcos Acuña, quiénes han tenido minutos en el cierre de la eliminatoria de copa. Jules Kondé está en duda, lo mismo que Yassine Bono y el lateral derecho Aleix Vidal. En medio de la expectativa se va moviendo el partido, que unos días después se traslada al Sánchez Pizjuán para poner al día la competencia.