El asturiano es el gran deseo de Laporta para remontar el vuelo
Luis Enrique se ha encargado de callar bocas a todos sus críticos. Estamos de acuerdo que quizás se pueda equivocar en las formas, en esa soberbia con la que habla y en la chulería con la que afronta las ruedas de prensa. Que cuestionar su trabajo como entrenador no tiene demasiado recorrido ya.
Al igual que en la pasada Eurocopa, Luis Enrique ha vuelto a dar en el clavo. Con una lista plagada de bajas sensibles como Pedri, Gerard Moreno, Morata, Dani Olmo, Ansu Fati o Jordi Alba, España no solo plantó cara a Italia. El baño a la actual campeona de Europa fue memorable. En San Siro, además.
Exhibición de España
Luis Enrique prosiguió con su reto a los que le critican colocando de inicio a un Gavi que se convirtió en el debutante más joven de la historia de la Selección Española. Y no defraudó el andaluz. Podemos decir que Gavi con su desparpajo y presión tras pérdida se comió el solito a Verratti, Jorginho y Barella.
España dio un recital completo de jugar al fútbol. Bien colocados, con transiciones a uno o dos toques, abriendo en juego por ambas bandas y generando un sinfín de oportunidades de gol. Pero es que en fase defensiva la activación tras pérdida era vertiginosa. A los italianos les duraba el balón pocos segundos.
Sueldo de Luis Enrique asequible para el Barça
No es de extrañar que Joan Laporta quiera a Luis Enrique en el FC Barcelona. El asturiano ha demostrado lo que puede hacer con Busquets, Pedri y Gavi. Confió en Ansu Fati desde el principio. Ha demostrado que sabe como nadie moldear a los jóvenes, única opción actual del FC Barcelona para competir.
Pero es que además, con los parámetros actuales de control económico, Luis Enrique se convierte en el único entrenador top que a día de hoy podría fichar el FC Barcelona. Porque con la regla del 4 y 1, habría muy poco espacio salarial para firmar un entrenador. Y el sueldo de Luis Enrique en la RFEF es de 1,5 millones de euros, más de 4 veces menos que lo que percibe Koeman. Todo encaja.