El feminismo tiene que hacer desaparecer a estos personajes que campan a sus anchas en cargos públicos de alta relevancia
En un mundo donde la igualdad de género y el respeto hacia la mujer son pilares fundamentales, ciertos actos pueden generar controversia y debate. Que se lo digan al Presidente de Valencia. El Presidente de la Generalitat Valenciana ha protagonizado de un episodio que ha levantado polvareda en las redes sociales y medios de comunicación.
Las campeonas del mundo de gimnasia rítmica, un grupo de jóvenes talentosas que han llevado el nombre de España a lo más alto del podio, fueron recibidas por el President de la Generalitat Valenciana en un acto oficial. Sin embargo, lo que debería ser un homenaje a su esfuerzo y dedicación se convirtió en motivo de crítica.
La polémica foto del presidente de Valencia con las campeonas del mundo
Las deportistas, arrodilladas ante el President, presentaron una imagen que muchos han tachado de inapropiada y desfasada. En una era donde la lucha por la igualdad de género está en su punto álgido, este tipo de actitudes no pasan desapercibidas. Se observan con lupa.
Las redes sociales se inundaron de comentarios y críticas hacia el acto. Muchos usuarios expresaron su descontento y sorpresa ante lo que consideraron un acto machista y fuera de lugar. Las gimnastas, que han demostrado su valía y talento en el escenario mundial, merecían un reconocimiento acorde a su logro, y no una imagen que las mostrara en una posición subyugada.
El papel del Consell
El Consell, bajo el liderazgo de Mazón, ha sido señalado por muchos como un reflejo de actitudes machistas. Este incidente ha avivado las críticas hacia una administración que, según algunos, parece vivir ajena a las demandas y realidades del siglo XXI. La polémica, además, viene en mitad de la tormenta generada por Rubiales con Jenni Hermoso.
La igualdad de género, el respeto y la valoración de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad no pueden ser obviados. Las instituciones tienen la responsabilidad de ser ejemplares en su actuar y de promover valores acordes a una sociedad moderna y justa. Mientras algunos defienden que se trató de un acto aislado y sin mala intención, otros ven en este episodio una muestra más de una actitud machista arraigada en ciertos sectores de la política.