Cordero se encuentra a la expectativa de los fichajes de diciembre y los fichajes de enero
Este final de año, no ha sido fácil para el Real Zaragoza y es que la mala temporada venía desde el pasado octubre, pero este mes de noviembre resultó ser fatal y esta vez, Julio Velázquez quiere empezar con nuevas estrategias. Cabe destacar que el club español ha tenido muchas derrotas.
Y es que en este proceso, Fran Escribá perdió su puesto de trabajo y el Real Zaragoza cambió de entrenador, poniéndose en manos de Julio Velázquez, que en su debut no pudo corregir ninguno de los muchos males que afectan al equipo y reincidió en los problemas y sumaron otra derrota.
Manu Vallejo, Bakis, Toni Moya, Enrich y Mouriño son los jugadores que más decepcionaron
Ahora mismo, el Zaragoza es decimocuarto y tiene a la misma distancia la zona de playoff y la de descenso. Ese es el panorama con el que Julio Velázquez se ha hecho cargo de la plantilla, sobre la que es imprescindible poner grandes objetivos y una parte importante de la responsabilidad.
Por otro lado, la directiva y la afición saben que son llamativos los casos de Manu Vallejo, Bakis, Toni Moya, Enrich o Mouriño por su bajísimo nivel hasta ahora. Ellos son los que el nuevo entrenador necesita recuperar. Marc Aguado también es una decepción para el equipo. Maikel Mesa y Mollejo son los únicos que lograron llamar un poco la atención.
Con la llegada de Julio Velázquez, el Real Zaragoza busca urgentemente algunos cambios
De este modo, Velázquez necesitará que los grandes fichajes del verano se conviertan en los grandes fichajes de diciembre desde este mismo sábado ante el Leganés. Ir sumando jugadores a su causa a la mayor celeridad posible. Se necesitan así mismo dos delanteros, un mediocentro, un lateral y un extremo.
Luego ya llegará enero y el mercado dará nuevas oportunidades para que el club y Juan Carlos Cordero apuntalen los pilares que más se muevan. Uno hay ya de máxima necesidad: un lateral izquierdo como se dijo anteriormente para que el equipo logré sumar puntos y demostrar otro nivel en la cancha.