Mateu Lahoz confirma la política de “nevera” por desafiar las indicaciones del VAR
Mateu Lahoz, conocido árbitro de fútbol, reveló en ‘El Partidazo de la Cope’ una práctica controvertida en el arbitraje: el envío a la “nevera”. Según Lahoz, este año hasta siete árbitros han sido apartados temporalmente (enviados a la nevera) por no seguir las recomendaciones del VAR.
Esta política pone a los árbitros en una posición complicada: o siguen las indicaciones del VAR, incluso si estas implican decisiones polémicas como pitar un penalti discutible o anular un gol, o enfrentan consecuencias financieras y profesionales significativas.
La difícil decisión de los árbitros frente al VAR
Los árbitros se enfrentan a una elección difícil. Por un lado, está la posibilidad de ser fieles a su criterio y enfrentar la “nevera”, con la consecuente pérdida económica. Por otro, está la opción de seguir las indicaciones del VAR, incluso si esto significa tomar decisiones que pueden parecer absurdas o injustas en partidos como Cádiz-Osasuna o Mallorca-Sevilla.
La presión es alta, tanto en términos de integridad profesional como de estabilidad financiera. Además, las declaraciones de Estrada Fernández sobre una “sala secreta” que da instrucciones a la sala VOR añaden una capa de misterio y controversia al funcionamiento del VAR y su influencia en las decisiones arbitrales.
El futuro del arbitraje y el VAR
Este escenario plantea preguntas serias sobre la autonomía de los árbitros y la transparencia del proceso de toma de decisiones en el fútbol. La dependencia del VAR y las presuntas prácticas de control sobre los árbitros podrían afectar la percepción de la justicia y la imparcialidad en el deporte.
La revelación de Mateu Lahoz sobre la política de “nevera” y la discusión sobre una sala secreta que influencia las decisiones del VAR sugieren que el debate sobre el papel de la tecnología en el fútbol está lejos de concluir. La justicia y autonomía del arbitraje en el fútbol resulta bastante dudosa.