Joaquín Caparrós está en la agenda del Sevilla FC como solución para salvar al equipo si la situación no mejora en las próximas jornadas
El banquillo del Sevilla FC está siendo el más difícil de entender este año. El club ya lleva tres entrenadores de forma consecutiva y es posible que no sea el último. Caparrós siempre está en la sombra para ponerse al frente del cargo. Los andaluces han hecho un mercado invernal decepcionante y no tienen el beneplácito de la afición.
Y es que se estiman curvas turbulentas en esta segunda parte de la temporada para el Sevilla FC. El descenso planea sobre la entidad y el bochorno que ello conllevaría sería una catástrofe para el equipo. La tecla que puede tocar el club para no sufrir esta debacle pasa por confiar en alguien de la casa. Caparrós se ha ofrecido varias veces como hombre de confianza y de club para el sevillismo.
Caparrós solución de emergencia en Sevilla FC
Y es que pocos equipos pueden decir que han tenido 4 entrenadores distintos en apenas 5 meses. Es complicado encontrar una gestión peor en la historia reciente de nuestra competición. El Sevilla FC navega sin rumbo y solo le puede salvar que haya tres equipos peores en España. La afición pide a Caparrós para lo que queda de temporada y evitar un descenso mayúsculo.
Otros equipo como el Cádiz CF han cambiado ya de entrenador en este mercado. Y es que si los gaditanos entran en buena dinámica y consiguen ganar partidos, pueden complicar aún más la situación en Nervión. El equipo amarillo se ha reforzado mejor que el sevillista y esto puede acabar por causarle una pesadilla a los hispalenses.
Nadie entiende a Quique en el club
Por increíble que parezca, nadie está de acuerdo con algunas decisiones de Quique Sánchez Flores. El hecho de seguir confiando en la defensa de 3 centrales está comprobado que no funciona en Nervión. Aún así, el técnico madrileño sigue intentando blindar al equipo pero la realidad es que la vulnerabilidad defensiva sigue exisiendo.
Además, el hecho de jugar con 3 centrales resta poderío ofensivo al equipo. Tampoco dispone de dos carrileros profundos. Acuña no está ni se le espera y Jesús Navas tiene una edad que le complica jugar con asiduidad. Por lo tanto, dejar de experimentar y fortalecer el equipo es la solución que entienden que mejor aplicaría pero Quique decide ir por libre y no mirar la realidad.