Ayer durante el partido disputado entre Real Madrid y Atlético ocurrieron varios encontronazos en la grada de animación de Florentino Pérez
Un derbi madrileño siempre es muy caliente en la capital de España. Da igual que sea en el Metropolitano o en el Santiago Bernabéu, siempre es probable que ocurran situaciones desagradables. En esta ocasión ha tenido lugar en uno de los lugares en los que más ha trabajado Florentino Pérez siendo presidente del Real Madrid. La grada de animación fue protagonista negativo de la jornada de ayer.
Y es que han aparecido documentos gráficos donde se ve a varios integrantes de la grada de animación con malas conductas. Concretamente, amenazando a rivales. Aficionados del Atlético de Madrid han tenido que marcharse ante las amenazas de los “no- violentos” como se supone que es el espacio reservado por Florentino Pérez.
Saltan chispas en la grada de animación del Real Madrid
La lástima es que no solo finaliza ahí la aventura. Al parecer, diversas fuentes que estaban en el estadio aseguran que fueron varios integrantes de la grada de animación en grupo a agredir a un aficionado. Algo que Florentino Pérez prohibió en su momento a los ultra-sur y por lo que se habilitó esa zona del estadio.
De ser cierto, la entidad madridista puede hacer frente a una gran sanción por parte de la UEFA. Este organismo recalca el respeto y la cordialidad en los estadios y penaliza el caso contrario. Por lo tanto, si se abre una investigación para descubrir lo sucedido, el club blanco tendrá que facilitar pruebas del hecho y ver como defenderse ante tales actitudes de sus aficionados.
Otros clubes han sido penalizados económicamente
En el caso de otros clubes, no ha sido una broma lo ocurrido. La mala educación de algunos de sus aficionados o el mal comportamiento ha sacudido a la entidad. Estas instituciones han sido objeto de una dura sanción económica que han tenido que hacer frente y que ha debilitado mucho a la sociedad.
Por otro lado, hay casos en los que la sanción no solo ha sido económica. En casos en los que se ha llegado a pasar a la violencia y posteriormente se ha descubierto, se ha cerrado el estadio. Clubes como el Sevilla FC tuvo que jugar una serie de partidos fuera de casa por sanciones impuestas por motivo del comportamiento de sus aficionados.