Manuel, un soltero veterano en busca del amor vuelve a First Dates, sorprendiendo a Carlos Sobera
Manuel, un comensal que no es nuevo en el restaurante de First Dates, ha decidido darle una segunda oportunidad al amor, regresando al programa tras seis o siete años de su primera aparición. Carlos Sobera, el carismático presentador de 63 años, lo recibió con afecto, sin imaginar la serie de revelaciones que Manuel estaba a punto de hacer. Al ser preguntado por su vida amorosa, Manuel sorprendió a Sobera al declarar que había estado con quince mujeres en los últimos dos años, mencionando una lista internacional de conquistas.
La conversación tomó un giro cuando Manuel expresó su deseo de encontrar a una mujer como la que ya tenía, lo que llevó a Sobera a cuestionar su presencia en el programa si ya estaba en una relación. La respuesta de Manuel, esperando coger a otra y a esa, puso fin a la charla con un contundente Adiós. No me hables. chao por parte de Sobera.
Una cita destinada al desacuerdo
La cita de Manuel fue con Isabel, una TCAE jubilada que, al igual que Manuel, se considera bastante experimentada en el terreno del amor. Sin embargo, el feeling no surgió entre ellos. Isabel buscaba a un hombre alto y, aunque Manuel era delgado, no cumplía con sus expectativas. La conversación rápidamente se dirigió hacia terrenos complicados, como la política y la edad, dos temas que suelen ser delicados en un primer encuentro.
Además, la discrepancia sobre la edad de Manuel y la falta de atracción física por parte de Isabel solo añadieron tensión al encuentro. Aunque ambos compartieron experiencias sobre sus relaciones pasadas y tocaron el tema del sexo, la química simplemente no estaba presente. Isabel, al final, expresó que no se imaginaba a Manuel en un contexto íntimo, sintiendo que físicamente no era compatible con él.
Un retorno lleno de sorpresas y revelaciones inesperadas
Manuel, quien había dejado atrás el escenario de First Dates hace aproximadamente seis o siete años, decide volver al ruedo del amor, marcando su regreso con una entrada que ni el mismísimo Carlos Sobera pudo prever. En su nueva incursión, este funcionario jubilado confiesa haber compartido momentos con quince mujeres de diversas nacionalidades en solo dos años, una confesión que dejó a Sobera perplejo y entretenido a la vez.
La cita de Manuel con Isabel, una TCAE jubilada con su propio historial de aventuras amorosas, prometía una velada de afinidades compartidas. Sin embargo, lo que se desveló fue una serie de discrepancias fundamentales que resaltaron la importancia de la compatibilidad y las expectativas en las primeras impresiones.