Una buena noticia tiene al argentino con la fe renovada de cara a los retos venideros
De las grandes decepciones en lo que va corrido de temporada, sin duda alguna lo del Atlético de Madrid debería escribirse con letras enlodadas. Su rendimiento en la temporada ha sido perverso, y los cuestionantes recaen sobre un entrenador, al igual que su proyecto al que le catalogan de falto de ideas y perfectamente renovable.
Eliminado de la Copa del Rey, apeado prácticamente del título de LaLiga, y habiendo perdido la final de la Supercopa, al colchonero le quedan muy pocas ilusiones. La renovación es un proceso que hasta acá no ha rendido frutos, y por ende los señalamientos se hacen habituales. Sin embargo, el cuerpo técnico ha recibido una buena noticia en las últimas horas.
Del trivote ya conocido en el medio, conformado por Koke, Thomas y Saúl podrá echar mano ahora mismo si quiere. Un argumento que promete ser la clave decisiva en el renacer del equipo en la temporada. Sus números con ellos en cancha son el incentivo que estaban buscando, y es que basar todo en la solidez que ellos transmiten si que termina siendo un tema de impacto.
El capitán vuelve tras su para por las molestias en su muslo, y los otros dos hacen lo propio tras estar inhabilitados por acumulación de tarjetas amarillas. Con ellos en cancha han ganado 12 encuentros, han empatado en 7 oportunidades y solo han caído tres veces. Números muy distantes a lo que ha sido este curso sin ellos.
Experiencia, liderazgo y un toque excesivo de compromiso le dan estos tres al medio campo del cuadro del Wanda Metropolitano. Argumentos sobrados, argumentos basados en el espíritu competitivo de un cuerpo técnico acostumbrado a pelear las grandes citas de tú a tú. Simeone tiene sus cartas listas, los rivales aguardan por sus respuestas en el campo.