Primer objetivo apuntado para este mercado invernal que está cercano en fechas han declarado algunos efectivos institucionales del cuadro colchonero
El Atlético de Madrid ha empezado a soltar sus fieras en cuanto a fichajes futuros se refiere, por eso se ha mencionado a Robin Gosens, y todo lo que es significa. Al parecer, el cuadro colchonero por pedido de Diego Simeone habría lanzado una oferta por el marcador de punta izquierdo que ha hecho unas cuantas temporadas fantásticas en el club italiano.
Lo que ha sucedido es que no se ha llegado a un acuerdo sensato, pues el valor exigido es bastante alto. Al límite del verano habrían pedido 50 millones de euros, que como era de esperarse estaban fuera de alcance para los colchoneros. Pero si han dejado marcado el territorio, pensando a futuro, y sobre todo, ajustando algunos por menores con el jugador en concreto.
El lateral que quiere Simeone estará solo disponible en enero
Robin Gosens entrará en su último año de contrato el verano próximo, fecha que se asume perfecta para intentar pujar por sus servicios. Sin embargo, ha surgido una idea mejor, apelando a la transparencia de los jefes italianos, y contando con el hecho que le da valor a su actualidad. Buscan cerrar un precio este mismo invierno para llevarse a un lateral que tanta falta hace.
Hoy solo cuentan con Renan Lodi como experto de la zona, y por tal motivo el estratega ha decidido cambiar el esquema táctico a tres defensores soltando carrileros que como extremos se suman más a tareas ofensivas. Lo ha hecho con Ferreira Carrasco, jugador que hasta acá ha cumplido a cabalidad esa labor.
Robin Gosens ve con buenos ojos recalar en LaLiga
A sus 27 años ha destacado por mucho en una competencia tan compleja como la Serie A. Asume su valor como carrilero de largo alcance, aportando una suma importante de asistencias y anotaciones para su posición. Gosens inclusive ha llegado a la selección de su país, y se ha ido ganando un puesto en lo que puede ser su participación a la copa del mundo.
Por el momento se cree que el valor pueda ser mantenido, y hay esperanza de tomarlo de cara a futuro. En invierno la actividad de fichajes es menor, y sabiendo que el jugador potencialmente no active su renovación se consideraría más factible. Ahora mismo ha dejado caer que sería una buena alternativa, y considera viable el hecho de firmar además por un club que siempre pelea en todas las competencias.