Se considera la opción del veterano punta alemán para disparar el ataque esta nueva temporada
Diego Pablo Simeone ha lanzado una de sus acostumbradas sorpresas en el mercado de verano al imponer el nombre de Thomas Müller para disputar la defensa del título de LaLiga Santander y la conquista de la Champions. Así lo ha dejado saber en las últimas horas luego de conocerse el deseo del punta del Bayern de Múnich por abandonar el club bávaro.
Todo hace indicar que la falta de minutos sería el condicionante principal, y el detonante para que se tomara tal decisión. No ha sido simple, y luego de varias reuniones se ha llegado a la conclusión que se está en nivel como para al menos disputar unos tres años al más alto nivel. Su estilo de juego, su personalidad y la capacidad goleadora ejecutan toda acción y lo ponen de primero en la lista de candidatos para acompañar a Luis Suárez.
Veteranía, experiencia y calidad todo lo que incorpora Thomas Müller
Hablar de su nivel es hablar de calidad, y vigencia pese a que casi cumple 32 años. Müller se ha mantenido y con confianza ha logrado regresar a la selección germana que probablemente disputará el mundial de Qatar 2022. Eso le obliga a estar a tope en su nivel y a mantenerse en la órbita de todos los grandes clubes del continente.
En el Metropolitano le consideran un factor muy relevante, un jugador que con su experiencia es capaz de vulnerar cualquier sistema defensivo por complejo que este sea. De hecho, puede jugar como referencia, como segundo punta e inclusive como extremo y generador. Su riqueza técnica le hacen destacar, impulsando un valor fundamental para Simeone en la construcción de todas sus plantillas.
Por el precio aún restan temas por acordar
Ya en materia financiera, lo de Müller recubre un hecho fundamental, ya que aún bajo las condiciones que se viene jugando, no baja su valor de los 30 millones de euros. Ese es un precio que buscan sea el determinado, y le lleve a manejar otros recursos al club con tal de sumarlo. Eso demarca un impulso de venta de activos, o de suma en otros formatos.
Lo cierto es que al jugador ya le ha llegado la noticia y la está valorando. Caer de pie en un equipo que tiene atado un título y que tiene toda la esperanza de crecimiento sube toda expectativa. El valor de su ficha ha de ser otro tema a liderar, buscando que merme sus aspiraciones según ha dejado ver la dirección deportiva. Todo está por verse.