Los de Mendilibar han dado el batacazo y ya piensan en armar su equipo de cara a la siguiente temporada
Ha resultado más emocionante que de costumbre esta última jornada de Liga en España. Atlético de Madrid se ha coronado campeón, Real Madrid ganó pero no le alcanzó, y Elche ha ganado asegurando su permanencia. Lo ha hecho gracias a la derrota del Valladolid y el empate de la SD Huesca para asaltar la casilla 18 y quedarse un año más en la máxima categoría.
Ahora es momento de celebrar pero sin duda a la vez de planificar un mejor andar. Sus jefes ya están analizando opciones y embriagados por la emotividad han soltado que van a enfocar todo en dos fichajes inmediatos. Estos fichajes responden a dos zonas de alta injerencia como la del ataque y la defensa, con Rafa Mir y Ezequiel Garay como los grandes protagonistas.
Aprovechando el descenso de un rival y la inactividad del otro, la permanencia del Elche brinda opciones
Por lo pronto se han dedicado a analizar cada caso. No es igual enfrentar un entorno convulsionado que un efecto positivo del otro y eso es precisamente lo que se busca. Con Rafa Mir la situación es absolutamente conocida, ha descendido y con su descenso su ficha está en el aire. Deberán negociar con Wolverhampton y a partir de allí empezar a diagramar su opción de compra.
Por el delantero joven se piden cerca de 6 millones de euros, que debería ser el margen que ellos tengan estipulado de ahora en adelante. Además, es el jugador que han marcado, no solo por sus condiciones, sino por estar en un momento dulce. Lo de Garay aparentemente es más simple, al no tener contrato y al estar buscando una oportunidad en España.
La emotividad puede tener sus efectos en breve
Para esto los tiempos están definidos, a partir del siguiente 30 de junio debería irse solucionando cada caso, antes de la entrada en vigencia del mercado que se antoja bien consternado. La directiva aún no anuncia cuál vaya a ser el presupuesto, pero si están en la misma onda y han adelantado en la gestión de convencimiento con el punta goleador del Huesca.
Al argentino le han pedido sus aspiraciones salariales y creen que es posible. Ambos podrían dar un salto de calidad, son futbolistas de un enorme talento, y con estatus en cada una de sus posiciones bien logradas. Ni Mendilibar, ni la directiva ni mucho menos la afición esperan poder seguir con la angustia que les tuvo en incertidumbre hasta el último minuto de los choques de hoy.