Grandes marcas deportivas, como la Nike, compiten por firmar con Aitana Bonmatí, la estrella del Barcelona y ganadora del Balón de Oro
Aitana Bonmatí, la talentosa jugadora del FC Barcelona y reciente ganadora del Balón de Oro, se encuentra en una posición privilegiada mientras grandes marcas deportivas luchan por asegurar su patrocinio: Su actual contrato con Nike finaliza el 31 de diciembre, aunque su compromiso con el Barcelona se extiende hasta 2025. Marcas como Puma, New Balance y especialmente Adidas, que ya patrocinó a Bonmatí antes de su paso a Nike en 2021, han presentado ofertas tentadoras.
La competencia es feroz, con Adidas haciendo esfuerzos significativos para recuperar a Bonmatí. Nike, por su parte, no quiere perder a una jugadora que ha tenido una temporada triunfal, ganando tanto el Mundial como la Champions. La presencia de Bonmatí en el fútbol femenino es tan destacada que incluso se le considera favorita para el premio The Best de la FIFA.
La decisión de Aitana Bonmatí y el potencial cambio a Adidas
El interés de Adidas en retener a Bonmatí refleja su deseo de mantenerla como uno de sus principales referentes en el creciente mundo del fútbol femenino. Esto coloca a Aitana Bonmatí en una posición estratégica, con la opción de regresar a Adidas, donde tendría menos competencia directa. Adidas también patrocina a Olga Carmona, la heroína del Mundial, y a la selección española.
Bonmatí, que aún no ha tomado una decisión, enfrenta una elección que impactará su carrera y su visibilidad como deportista. Su influencia va más allá del campo, siendo un referente en el compromiso social, colaborando con ACNUR y otros organismos. Esto, sumado a su gran seguimiento en redes sociales, hace que su elección de patrocinador sea aún más significativa.
Bonmatí, una figura influyente dentro y fuera del campo
El impacto de Aitana Bonmatí en el fútbol femenino y en las causas sociales la convierte en una figura codiciada por las principales marcas deportivas. Su decisión no solo influirá en su carrera deportiva, sino también en su rol como modelo a seguir en el ámbito social. Con 1,5 millones de seguidores en Instagram, Bonmatí no solo es una jugadora de élite, sino también una influencer destacada.
La elección de Bonmatí será determinante en cómo las marcas deportivas ven el futuro del fútbol femenino y su marketing. Con su decisión pendiente para la próxima semana, la expectativa es alta sobre cuál será su próximo paso en esta importante fase de su carrera.