La poca compenetración con el capitán le tienen con pie y medio fuera del cuadro culé
Ni el triunfo complejo que han logrado rescatar del Benito Villamarín del fin de semana han logra disipar el denso ambiente que se vive en el FC Barcelona. Ahora, y como si se tratase de una novela sin fin, aparece de nuevo el caso Griezmann, del que se dice tendría efecto en uno de los fichajes estelares del verano, el de Neymar.
Está muy claro que ni el club, ni mucho menos Messi, van a dejar de presionar para conseguir fichar el delantero brasileño que hoy está siendo bastante criticado en París. Pero claro, dicha contratación no será barata ni sencilla, y en lo que respecta a las posibilidades del club, atenta con la presencia de al menos tres cracks de talla mundial.
El primero de ellos es el francés ex Atlético de Madrid. Griezmann no se la lleva bien con Messi y eso es ya todo un condicionante. Su figura está hoy en día por encima de Suárez, y no solo por su lesión, sino por edad y proyecto. Pero el astro argentino no pondrá eso como argumento, para él, el uruguayo está muy por delante y le quiere fuera al francés.
Coutinho teme por la llegada de Neymar a Can Barça
El otro que viene ahí en la lista de transferibles para dar solvencia al fichaje del ex del Santos, es su compañero de selección, Philippe Coutinho. El mediapunta o extremo está viviendo un calvario en Bayern Múnich, el club bávaro no hará efectiva la opción de compra, y de momento todos los caminos indican que saldrá en venta definitiva a un club de la Premier.
Su valor de mercado se baja hasta los 80 kilos, y de no ocurrir algo extraño, ese será el movimiento más indicado para el periodo de pases de verano. Liverpool asoma, pero no es el único ni el mejor parado para ofrecer una solución definitiva. Bartomeu por su parte le da prioridad, y entiende que desprenderse de él, será importante para dar congruencia al fichaje de un jugador que ya estuvo, y que lo ganó todo vestido de blaugrana.
Y más les convendrá no hacer enojar a la pulga, ya saben todos que posee una cláusula que le permite salir gratis al final de cada temporada. Los asomos de su partida han escandalizado el entorno general, que podrían ir peor, si es que finalmente Bartomeu decide no darle prioridad al caso Neymar que tanto le ha pedido.
