Para el nuevo entrenador culé esa es una salida cercana e inmediata a la falta de jerarquía en el pórtico
Ha vuelto a sonar con mucho poder la inclinación del FC Barcelona por vender a Ter Stegen, un portero que si bien ha rendido a un excelente nivel, en este preciso instante está sumido en una crísis muy pareja teniendo en cuenta el resto. Por esa razón Xavi ha atendido a su responsabilidad y ha puesto en contexto la llegada de Kepa, un meta que conoce y sabe hasta dónde puede rendir.
Por lo pronto y aunque se trate de una posibilidad, lo cierto es que no ha dejado de rondar la cabeza de los encargados que se han fijado en las alternativas suministradas por el Chelsea a todo el que lo intente. Gusta por su gran sentido de ubicación, por ser un portero que maneja bien los pies, y por ser un meta con amplia experiencia en el fútbol internacional. Lo demás está sujeto a otras consideraciones.
El problema de sumar a Kepa viene del lado salarial, así lo han sabido desde el FC Barcelona
Si bien la postura ha estado basada en criterios estrictamente profesionales, se debe resaltar que la operación no es para nada sencilla. En primer lugar porque antes deben solucionar el caso del alemán, que aunque no esté bien, tiene contrato vigente. Y luego porque Chelsea pagó en su día 80 millones de euros y no quiere perder mucho dinero en esta operación.
Además hay que saber que el salario de Kepa es elevadísimo, unos 7 kilos por temporada, ni más ni menos. Y a eso se le debe sumar que Chelsea pretende cerrar acuerdos fijos, es decir que en caso de negociar una cesión la temporada inmediatamente siguiente estará amparada por una venta obligatoria. Todos conceptos muy fuertes cayendo sobre el Barça en complicaciones económicas.
Un contendiente adicional además complicaría mucho más las cosas
Ya viendo todo desde el punto de vista contractual, hay que seguir analizando el tema y aparece que en el entorno la Lazio está siguiendo sus pasos. Los romanos quieren inflar esa posición dando a conocer a los jefes blues que el español no podrá pelear la zona a Edouard Mendy. Lo que buscan es sacar un precio favorable antes del comienzo del mercado invernal.
Por el momento no hay respuestas y mucho menos posturas cercanas. Pues Chelsea no se quiere hacer cargo de ningún porcentaje de salario, y tampoco quiere ceder en precio. Una situación compleja que debe aparecer mucho más desarrollada en enero que es cuando se acerca la fecha planificada para resolver este inconveniente.