El buen hijo vuelve a casa, y el mediocampista lo hará luego de 9 años
Nueve décadas tuvieron que pasar para que la afición del Levante UD viera el regreso del mediocampista Vicente Iborra. El moncadense se marchó de la entidad Levantinista al término de la temporada 2012-13 con rumbo al Sevilla FC. Luego estuvo en el Leicester City y finalmente en el 2018 regresó a España para unirse al Villarreal CF.
El contrato del volante valenciano con el Submarino Amarillo concluye en el 2024, pero Unai Emery no cuenta con él de cara a la siguiente temporada. De hecho los minutos que tuvo en la pasada campaña fueron pocos, y el veterano futbolista es consciente de ello. De esta manera, el jugador se muestra complacido con la oportunidad que le brinda su primer club.
Vicente Iborra y su objetivo número 1 una vez aterrice en el Levante
Solo en una ocasión el volante de marca tuvo que jugar con el primer equipo Granota en segunda división. Eso fue en la temporada 2008-09, pero en esa ocasión lograron nuevamente el ascenso con una magnífica actuación de Iborra. El moncadense quiere repetir ese hazaña, y por ello se traza como meta principal regresar a LaLiga Santander de la mano del Levante en la temporada 2022-23.
Iborra es consciente de que el conjunto Granota no pasa por los mejores momentos tanto en lo económico como en lo deportivo. Sin embargo, está decidido a aportar el 100% de su compromiso para contribuir con el objetivo de ascender en este curso. El jugador sabe que no será nada fácil debido al alto nivel de competitividad en LaLiga Smartbank.
El Levante pedirá la cesión con opción de compra de Vicente Iborra
Al restarle dos años de contrato con el conjunto castellonense, la dirección deportiva encabezada por Felipe Miñambres contempla pedir una cesión con su respectiva opción de compra, por una cifra que no sobrepase el millón de euros. En el Submarino les conviene liberar espacios en la medular y más si se trata de jugadores con los que no cuenta Emery.
En la pasada campaña, Iborra sumó 1.221 minutos repartidos en 20 partidos de liga, 3 de copa, y 1 en Champions. Es claro que el cuerpo técnico solo lo tenía como un jugador emergente más no como una pieza clave. Iborra quiere sentirse útil y más si se trata del equipo de sus amores, sin importar que este se encuentre en segunda división.