Los celestes apuntan alto el próximo verano con fichajes procedentes del Real Madrid
El Celta, tras estrenarse con una victoria bajo el mando de Claudio Giráldez, tiene la vista puesta en reforzar su plantilla de cara a la próxima temporada para evitar situaciones de riesgo como la cercanía al descenso experimentada este año. En este sentido, el Celta ha puesto sus ojos en dos fichajes del Real Madrid: Joselu y Diego Pampín.
Joselu, con 33 años y una larga trayectoria que incluye una previa etapa en el filial del Celta, surge como una solución a la falta de gol que ha padecido el equipo esta temporada. Su capacidad en el juego aéreo y su experiencia podrían complementarse perfectamente con la juventud de Strand Larsen, ofreciendo al Celta una mayor versatilidad en ataque.
Diego Pampín, la promesa de reforzar la defensa
La operación se presenta complicada, especialmente con la posible llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid, lo que podría limitar las opciones de Joselu de permanecer en el equipo blanco. Diego Pampín, por otro lado, representa una apuesta por el talento joven y la velocidad en el flanco izquierdo de la defensa.
Su potencial regreso al Celta, tras finalizar su cesión en el Andorra, supondría el fortalecimiento de un área crítica para el esquema de Giráldez, especialmente en un sistema que otorga libertad ofensiva a los carrileros. Pampín, con un conocimiento previo de la entidad y una habilidad innata tanto en defensa como en ataque, encajaría a la perfección en los planes futuros del Celta.
Los hermanos Alcántara en el horizonte del Celta
Además de las miradas puestas en el Real Madrid, el Celta contempla la posibilidad de incorporar a los hermanos Alcántara, Rafinha y Thiago, hijos del legendario Mazinho. La conexión familiar con el club y el deseo expresado por Mazinho de ver a sus hijos vistiendo la camiseta del Celta añaden un atractivo especial a estas potenciales transferencias. Mientras Thiago busca salir de un Liverpool donde no goza de la confianza plena de Klopp, Rafinha podría considerar un regreso a España tras su paso por el Al-Arabi S.C. de Catar, buscando reencontrarse con el nivel competitivo que caracteriza a La Liga.
El Celta de Vigo se prepara para una temporada llena de esperanzas y expectativas elevadas. La posible llegada de figuras como Joselu y Diego Pampín desde el Real Madrid, sumada al interés en los hermanos Alcántara, refleja la ambición del club por construir una plantilla competitiva que pueda aspirar a más que la mera permanencia en primera división. El entusiasmo en las oficinas de Balaídos es palpable, y la afición espera con ansias la confirmación de estos fichajes que podrían marcar un antes y un después en la historia reciente del Celta.