Las lesiones en el mundo del fútbol son el pan de cada día. Sin embargo, a veces por desgracia y otras veces por falta de sentido común, algunas de las lesiones no son tan cotidianas. Lesiones celebrando goles, jugando fuera de los terrenos de juego e incluso acicalándose, las lesiones más estúpidas de la historia pocas veces tienen que ver con los terrenos de juego. Estas diez lesiones, se dividirán en tres apartados: Lesiones caseras, atropellos y celebraciones.
Lesiones caseras
Santiago Cañizares
Una de estas “estúpidas” lesiones dejó a uno de los mejores porteros españoles, Santiago Cañizares, sin poder disputar el Mundial de Corea y Japón en 2002. El guardameta del Valencia sufrió un corte en el tendón de un pie tras habérsele caído en el pie un frasco de colonia en su habitación.
Alessandro Nesta
Un mes estuvo de baja el antiguo central del Milán Alessandro Nesta por una rotura en el tendón de la muñeca. Su afición a la PlayStation fue la que provocó esta lesión ya que el internacional italiano pasaba jugando muchas horas y ello fue lo que le provocó esta curiosa lesión que apartó a Nesta por un mes de los terrenos de juego.
Liam Lawrence
Un labrador fue el causante de su accidente. El propio Liam Lawrence, internacional irlandés, se cayó por las escaleras de su casa tras pisar a su perro, que se encontraba tumbado en la parte de arriba de las escaleras. El jugador, a oscuras, pisó al perro, lo que produjo que resbalara y cayera por todas las escaleras de su casa, lesionándose para varios meses por una rotura de tobillo.
Atropellados
David Batty
David Batty fue lesionado por su hijo |Foto: Getty Images
El que fuera jugador de equipos como el Blackburn Rovers o el Newcastle se pasó varios meses de baja tras romperse el tendón de Aquiles de la manera más estúpida. El internacional inglés fue atropellado por su propio hijo con un triciclo, lo que le mantuvo lejos de los terrenos de juego por una buena temporada.
Ever Banega
Otro futbolista con pasado valenciano, Ever Benga es otro de los protagonistas de las lesiones más ridículas. El actual jugador del Newells fue atropellado por su propio coche en una gasolinera tras no haber puesto el freno de mano mientras echaba gasolina. El resultado de este atropello fue una rotura de tibia y peroné que le mantuvo fuera de los terrenos de juego medio año.
Jérôme Boateng
El futbolista del Bayern de Munich fue atropellado, mientras viajaba a disputar un partido con la selección alemana de fútbol, por un carrito de las bebidas cuando se encontraba en el avión. Este atropello provocó que Boateng se lesionara un tendón de su rodilla, lo que le apartó de los terrenos de juego una temporada.
Alan Wright
Otro de los jugadores que estuvo apartado de los terrenos de juego debido a su coche fue Alan Wright, jugador de la premier ya retirado. El que fuera jugador de Blackburn Rovers o Aston Villa, entre otros, será recordado por ser el jugador más pequeño de la Premier (1,63 metros). Su estatura fue la que le provocó la lesión, ya que se lesionó en la rodilla por estirarse tanto para poder llegar al acelerador de su Ferrari. El jugador acabo cambiando su coche por un Rover 416.
Lesiones celebrando goles
Martín Palermo
El ya retirado delantero argentino estuvo varios meses sin jugar por una fractura de tibia y peroné. ¿Por qué? El jugador, que por aquel entonces defendía los colores del Villarreal, se fue a celebrar un gol con la afición con la mala fortuna de que una de las vallas que allí se encontraban, se le cayó encima, lo que provocó su lesión.
Sergio García
Otra de estas lesiones por celebrar un gol apartó a Sergio García de los terrenos de juego por un mes. El delantero que actualmente juega para el Espanyol, se lesionó tras tirarse de rodillas sobre el césped. La intención del jugador era de la deslizarse, pero el que por aquel entonces era jugador del Betis, se quedó clavado en la hierba, lo que le provocó una lesión de rodilla que le mantuvo un mes fuera de los terrenos de juego. Posteriormente, el jugador del Bayern de Munich Robben, también se lesionó de la misma manera.
Paulo Diogo
La lesión más espectacular a la hora de celebrar un gol fue la de Paulo Diogo. El jugador que durante aquel encuentro militaba en el Servette, se subió a las vallas para celebrar un gol con los aficionados. El resultado fue que tras que su anillo de casado se quedara enganchado en las vallas, el jugador perdió parte de su propio dedo.
