Su desempeño en el evento internacional ha sido excepcional, llegando a instancias definitivas y resaltando por su labor defensiva
La nueva temporada supone retos gigantes para las administraciones deportivas en relación a la obligación y al compromiso con su gente. El mejor ejemplo lo impone en este momento el Real Betis, que ante la salida de Álex Moreno has tenido que moverse con premura en el escenario abierto de verano en busca de un remplazo de quilates.
Con el marco financiero limitado, sus alternativas tendrán que reducirse drásticamente. Es por eso que han llevado al campo efectivo la posibilidad de sumar bien sea a Ricardo Rodríguez o a Ludwig Augustinsson. El suizo y el sueco han sido muy relevantes en las participaciones de los suyos en toda instancia, imponiendo carácter, orden y sobre todo experiencia.
Precedido de un momento excepcional, el remplazante de Álex Moreno debe entender que el Betis está para grandes cosas
Así ha empujado la dirección deportiva y cuerpo técnico esta nueva etapa en el club. No van a sucumbir tan fácilmente eligiendo jugadores sin el respectivo análisis. Para la banda entienden que el puesto está cubierto tras la compra en propiedad de Juan Miranda, pero son dos competencias de un altísimo nivel que requieren respaldos para entrar en rotaciones.
De manera que Ricardo Rodríguez parece ser el jugador a tomar. Aunque es el más complejo, piensan que el hombre del Torino podría ser un valor de fundamento para darle jerarquía a esa zona. Puede jugar como lateral, donde lo ha hecho toda su vida, o como central como viene siendo en su selección. Tiene salida, es un enorme asistidor, y tiene una gran pegada de media distancia. El problema su precio, que es mucho más alto en relación al otro opcionado.
Inteligencia en el mercado para hacer prevalecer sus intereses
Lo de Ludwig Augustinsson parece en teoría mucho más simple, y es que tiene sentido. El club en líneas generales ha botado la idea de adquirir un jugador que cueste sensiblemente menos de lo que van a recibir por Álex Moreno. Los turcos han arrojado hasta acá una oferta de cesión con opción de compra obligatoria para verano de 2022 por valor de3 3,5 y hasta 4 millones de euros.
Ese precio podría no ser suficiente, pues su idea es regresar el valor pagado en su momento por el lateral desde Rayo Vallecano que fue de 8 kilos. Así pues, habrá que esperar al término de las negociaciones para establecer la fidelidad de las mismas. Aún hay temas por tratar, y los jugadores están en plena expectativa.