El plan en marcha por parte del entrenador busca con estos dos jugadores hacer retornar los títulos a la capital
La incertidumbre sigue estando sembrada en el manto que rodea al fútbol en España y el resto del mundo. Sin embargo, en Real Madrid esto parece ser un motivo adicional para ir perfilando su plantilla, ir recabando en donde tienen objetivos e ir acercando sus ofrecimientos al plano comprobable. Pasa con Mbappé y pasa con Haaland, la dupla en ataque que tienen en mente hace un par de meses.
De los dos futbolistas referenciados han existido informaciones independientes, cada caso es especial y cada uno de ellos acarrea una historia. Y es que una vez retirado de la plantilla Cristiano Ronaldo, y tras la irrupción dorada de Karim Benzema fue el francés el que se robó las miradas, pero es en este momento el noruego el que se lleva toda la atención de afición, directiva y prensa.
Las soluciones inmediatas no han rendido
Por eso confiaron en absoluto en descargar la presión, responsabilidad y hechos en lo que tienen, no en vano la inversión ha sido fuerte en algunos momentos. Hazard sigue estando por explotar, y Jovic ha resultado una apuesta fallida. Dos movimientos que hasta acá dejan más dudas que certezas, y obligan al club en todas sus dimensiones a buscar soluciones en el mercado.
El primero en llegar sería la estrella del PSG, que tras lo anunciado meses atrás, tiene todo listo para ser el nuevo integrante de la familia merengue. Ha dicho que su deseo es jugar en el Bernabéu como local, y que aceptaría las condiciones económicas que hasta el momento se han tocado. Caso más complejo para el punta del Borussia Dortmund, que acaba de ser traspasado y cuenta con que su cláusula se activa a partir del siguiente verano.
El plan de Zidane es claro
Una vez superados los temas contractuales y legales, se dice que el verano de 2022 será la fecha precisa, y para ello el entrenador tiene su opinión al respecto. Al ser Haaland un hombre más de referencia en ataque podría jugar tranquilamente al lado de Mbappé. La figura campeona del mundo se siente más cómodo con alguien definido en punta, quedando liberado y con la cancha de frente para correr y hacer lo que mejor sabe.
El sueño de la afición sigue siendo verles juntos, posicionados en lo que será la nueva visualización de la ofensiva, y con sus roles definidos. Además, se espera que para entonces los estadios vuelvan a estar llenos, que la gente acompañe y que los fantasmas económicos estén erradicados. Un panorama muy dulce, al que se le deberá ir haciendo gestión desde ya.
