Un buen precedente han hallado los directivos merengues en los estatutos del ente regulador del fútbol mundial
Cuando se trata de fichajes por lo alto y de enorme envergadura mediática, hay que hablar de dos clubes en el mundo, del Real Madrid y del Manchester United. Hoy por hoy, enredados en un caso específico, el de Paul Pogba, ven como esta medida les está acarreando más esfuerzos de los que se llegaron a pensar en su momento, a tal punto que ha sido la misma FIFA en ablandar el tema exponiendo las posibilidades del jugador.
Dueño de una irregular temporada, el mediocampista campeón del mundo jamás ha dejado de estar en la lista de consideraciones de su compatriota y entrenador, Zinedine Zidane. En este instante, y producto de la para obligatoria es que han visto envuelto el caso en asuntos mucho más fuertes que hacen ver las posibilidades a flor de piel.
La sentencia dice que si el jugador desea desvincularse de su club, la FIFA podría apoyar dicha decisión por intermedio de un ajuste interno. Ese ajuste lo que hace es hacer que el club que esté interesado en él pague un valor simbólico que va de entre los 50 y los 60 millones de euros, la mitad de lo que en este instante pide el United por sus servicios, 110 kilos.
Zidane abre la puerta sin problema
Una noticia de este calibre es evidente un bálsamo a quienes han estado atentos a la evolución del jugador en los últimos tiempos. Zidane sobre todo, que ha sido el promotor de este empuje que lleva ya un año entero intentando ser concretado. Sin embargo, hay fuerzas que se muestran muy cautas respecto a este tipo de decisiones, y sus razones tienen de sobra.
Florentino Pérez es uno de ellos, y es que recurrir a este tipo de recursos no es que sea propiamente ético, ellos más que nadie lo saben. A clubes que están atados al empuje mercantil normal esto le es una burla, y entiende que es muy apresurado intentar si quiera dejarse tentar. No es el momento, y al menos la señal ha sido esperar a que se normalice el ambiente general para planificar definitivamente su maniobra.
Sigue estando en un manto completo de duda el proceder merengue en referencia a este tema. Los merengues no quieren dar varios pasos a la vez, y entienden que de su comportamiento se derivan muchas de las reacciones que buscan sean idóneas para el momento. Pogba sigue estando justo allí, y a su lado Van de Beek y Fabián Ruíz.