Preocupados y bastante enfocados se encuentran sus directivos presionando para la reanudación temprana
Como un balde de agua fría ha sido recibido el hecho de que LaLiga se suspendiera hasta nueva orden en la Real Sociedad. El equipo txuri-urdin viene cumpliendo una enorme campaña, al punto de haberse metido en la gran final de la Copa del Rey y de estar colocado por clasificación en puestos de Europa. Gran parte de ese trabajo se lo deben a Imanol Alguacil, un estratega que ha podido sacar lo mejor de su grupo de trabajo.
Por donde se mire es todo un hito, a las malas temporadas anteriores y la irregularidad frecuente, se les sumaba el hecho de caer a manos de los referentes casi por obligación o costumbre. Bajo el mando del entrenador actual el chip ha cambiado, y hoy pelean de frente y sin miedo, o que se lo pregunten al Real Madrid.
Pero ni todo eso ha podido eliminar los puntos de preocupación mayores, la pérdida económica por todo este boom mediático que ha significado la propagación de la pandemia del coronavirus. La Federación ha suspendido LaLiga y podría acabarla según indican varias fuentes. Si eso sucede el club daría por resignada parte de sus entradas por conceptos por derechos de televisión.
Aperribay peleará hasta las últimas instancias
Una cosa es verlo y otra plantearlo, así parece que lo tiene entre ojos el presidente el cuadro txuri-urdin. Jokin Aperribay no está para nada contento con esta posibilidad y razón ha de tener. Si se confirma la terminación del torneo, más allá de que consigan buenas ubicaciones en el casillero general, está el hecho de ceder al menos el 33% de los ingresos producto de los derechos de televisión.
Este es un fuerte músculo de entrada económica que apoya a la tesorería a mantener la salud financiera a lo largo de una temporada como esta. En total unos 20 millones de euros, que para un equipo como el de San Sebastián es realmente importante. Esto afecta directamente en la planificación de una temporada, y se agrava si es que finalmente consiguen meterse a la disputa de torneos de un mayor nivel.
Para el presidente las cosas van de ese modo, y no descansará hasta exponer sus argumentos ante los encargados de impartir este tipo de decisiones en las altas esferas. Los intereses de un club no cree se puedan ver afectados tan drásticamente, y en la medida que sus capacidades políticas se lo permitan, va a hacer frente a todo ello. Una nueva pelea se abre en medio del pánico general.