César Moreno está cerca de ser el primer fichaje del Real Zaragoza de cara a la próxima temporada
El Real Zaragoza está intentando darle un giro a los acontecimientos para salir de la situación tan crítica en la que se encuentra. Para ello, está recurriendo a realizar fichajes. Todos están cerca de llegar de cara a la siguiente temporada. Volver a aspirar a la posibilidad del ascenso es básico para los maños. Por lo tanto, el próximo que llegará será César Moreno, actualmente en el Valencia CF, quien podría ser el primer fichaje de Juan Carlos Cordero para 2025.
El jugador nacido en Cartagena está destacando mucho en el club valencianista. Se trata de un centrocampista posicional con muy buen manejo de balón. El joven de 22 años ha caído de pie en Valencia. Ha sido trascendental para los resultados del filial y ha llamado la atención de otros equipos rápidamente. El más interesado ha sido el Real Zaragoza. Equipo que quiere darle primera oportunidad en el fútbol élite.
El Real Zaragoza dispuesto a todo por conseguir el fichaje
Y es que el lavado de cara que necesitan los maños es radical. Otra temporada en la que se esperaba estar luchando por el ascenso. Sin embargo, el Real Zaragoza está navegando por la categoría de plata. La entidad se encuentra en un periodo de transición. Donde necesita volver a tener un equipo que de aspiraciones. Por lo tanto, reforzarse con fichajes es el punto de inflexión para construir el nuevo sueño.
César Moreno llegará para solucionar la línea con más problemas esta temporada. La sala de máquinas del conjunto aragonés está siendo un dolor de cabeza para el entrenador. Bajas, sanciones y problemas de rendimiento están llevando al equipo a una dinámica inestable. Por ello, dar plenos poderes a un jugador de confianza es clave.
El ascenso una obsesión
Una de las razones por las que los maños siguen sin disfrutar del fútbol de Primera División es el excesivo anhelo que hay del ascenso. Estar tantos años en Segunda División es una situación muy dura para un histórico. Esto ha hecho que el deseo se convierta en obsesión. Lo cual es contraproducente. Ya que los aragoneses consideran un fracaso cualquier proyecto que tenga momentos bajos.
Esta situación está llevando a una gran inestabilidad al club. El excesivo movimiento de jugadores, entrenadores, directivas está mermando mucho el objetivo. Un proyecto estable siempre tiene curvas, las cuales no tienen que eliminar todo lo construido. Por lo tanto, dar el protagonismo a una serie de jugadores y confiar en ellos es clave.