Los de Luis Enrique admiten que han pensado en las posibilidades de evitar un duelo ante la pentacampeona del mundo y afrontan el definitorio choque ante Japón con todas las opciones abiertas
Uno de los comentarios más extendidos en la actualidad de la Selección es el hipotético duelo España Brasil de los cuartos de final del Mundial de Qatar. Aunque hay opiniones para todos los gustos, hay un dato que es irrefutable: Tanto españoles como brasileños son los que han hecho el mejor fútbol en lo que llevamos de mundial.
Porque Argentina y Francia aparecen también entre las favoritas, pero más por el rendimiento de Mbappé y Leo Messi que por el juego coral. España y Brasil son el rival a batir. Los que presionan más arriba, los que más y mejor tratan el balón, los que línea por línea parecen mejores equipos.
La lógica sitúa el España – Brasil en cuartos
Sin embargo, la lógica dice que el duelo entre españoles y brasileños va a llegar en los cuartos de final. Muy pronto para que se enfrenten las dos mejores selecciones de esta Copa del Mundo. Pero eso de la lógica no siempre se cumple en el mundo del fútbol. Hay varias combinaciones en las que España podría acabar segunda de grupo.
Si España gana a Japón será primera de grupo pase lo que pase. Pero analicemos el resto de opciones. Una victoria de Japón pondría a los japoneses líderes de grupo. En ese momento, si Alemania y Costa Rica empatan, o si Alemania gana por menos de 7 goles de diferencia, España acabaría segunda de grupo.
Brasil tiene casi asegurada la primera plaza
El empate de España, si viene acompañado de victoria de Costa Rica, o de goleada histórica de Alemania, también dejarían segundos a los de Luis Enrique. En cualquier caso, el seleccionador ya ha dicho que no se guardará nada ante Japón y que el objetivo es ganar.
Por el lado de Brasil también se podría plantear intentar evitar a España. Pero las combinaciones son todavía más difíciles que en el caso español. Porque Brasil será primera en casi todos los casos. Solo una derrota ante Camerún, unida a una goleada de Suiza a Serbia podría cambiar el liderato del grupo.