Muchas veces no se tienen en cuenta ciertos parámetros para calibrar la toma de decisiones en un club de fútbol
La derrota estrepitosa del Sevilla FC ante el Atlético de Madrid ha activado la búsqueda de un nuevo entrenador y el nombre de Sampaoli es uno de los que más suenan. Muchas veces se toman decisiones en función de corazonadas, por recuerdos que se tienen de alguien o por lo que pudo hacer en el pasado. Y puede ser el peor error.
Monchi ya reconoció que se había quedado con la espinita clavada del paso de Marcelino por el Sevilla FC. Sin embargo, el asturiano ya ha rechazado la propuesta, expectante por lo que pueda suceder en el banquillo de la Selección tras el Mundial de Qatar 2022.
Monchi piensa en Sampaoli como solución
En esas espinitas de Monchi también aparece un Sampaoli cuyo paso por el Sevilla FC en la temporada 2016-2017 no fue tan malo. El chileno dotó de una energía espectacular a la plantilla y el equipo se convirtió en una apisonadora en los primeros meses de competición.
Sin embargo, esa energía se fue desvaneciendo. Aun así el Sevilla FC fue cuarto en la Liga Santander, asegurando un año más plaza en la Champions league. Se perdió la Supercopa de Europa con el Real Madrid y la Supercopa de España con el FC Barcelona. En la Copa tocó en suerte el Real Madrid en 1/16 de final. Mientras, en Europa, el Sevilla FC no fue capaz de superar al Leicester en octavos de final.
Los problemas de Sampaoli en el Sevilla actual
Pero no hay que analizar los resultados para saber que Sampaoli no puede ser la solución a este Sevilla FC. Si atendemos más al aspecto táctico, el chileno es fiel al sistema de 3 centrales. Con la actual plantilla del Sevilla FC y sin realizar pretemporada, no parece lo mejor confiar en los defensas que hay tras la salida de Koundé y de Diego Carlos.
No hay soluciones sencillas en una plantilla que se ha quedado muy descompensada. Da la sensación de que Lopetegui merece más crédito al tener jugadores que llegaron tarde y quedeben adaptarse como Isco, Dolberg o los que salen lesión como Lamela o Suso. Talento hay de sobra para enderezar el rumbo.
