Una persona se hace viral tras denunciar en las redes el engaño al que fue sometido su madre
Vivimos en un mundo cada vez más competitivo en el que nadie mira más allá de sus propios intereses. La mayoría de empresas importantes tiene en nómina a trabajadores semi explotados, que cobran una miseria y se tienen que jugar todo a las comisiones y bonus en función de objetivos logrados. Vodafone es un caso claro.
Seguramente no hay persona que no esté harta de que le llamen ofreciéndole el cambio de compañía, o jugosos descuentos en la propia compañía que ya paga. Esos que llaman cobran muy poco y tienen que aprovechar su destreza en las llamadas para vender algún producto más caro y así pillar el bonus.
Práctica abusiva
Sin defender esta práctica, es cierto que muchas veces su sueldo no da para vivir en el mundo que tenemos hoy en día. Y cada vez son más empresas las que ofrecen sueldo base pequeño y objetivos ambiciosos. Al final se convierte en una especie de competición.
Y es dicha competición aquellas personas más vulnerables son las que más sufren. En esta caso las personas ancianas, mayores de 75 años, son los blanco más frecuentes de este tipo de francotirador al teléfono. Se ha dado un caso que saca los colores a Vodafone.
Los mayores los más vulnerables
Porque un usuario ha denunciado lo ocurrido con su madre. Una señora de 77 años, que tiene varios servicios con Vodafone desde años. La señora tiene párkinson, para más inri. Resulta que recibió una llamada de Vodafone para hacerle un descuento por fidelización.
La señora asintió muy agradecida y al cabo de unos días se destapó lo que realmente había ocurrido en esa llamada. El agente de Vodafone no le hizo ningún descuento, al revés, le pasó a un paquete de servicios más caro. La factura pasó de 44,81 euros a 59 euros. Y el agente seguramente cobró su ansiado bonus. Un ejemplo de lo mal que está el mundo.
