La entidad cántabra pasa a la ofensiva ante el nuevo orden financiero que se presenta en 2021
El Banco Santander parece haber cambiado radicalmente de ideal y ha pasado al ataque por el Banco Sabadell. Ana Botín siempre se ha mostrado contraria a las fusiones, sobre todo a nivel nacional, pero el nuevo panorama financiero hace que la entidad cántabra esté perdiendo terreno ante las grandes fusiones que se negocian en España.
Sin ir más lejos, la fusión de Bankia y Caixabank ha creado ya un banco que a nivel de volumen nada tiene que envidiar al Banco Santander. Todos buscan colaboraciones siguiendo los consejos del BCE y parece que en Santander han escarmentado y han pasado al ataque.
El Santander pasa al ataque
Porque tras Bankia y Caixabank, el BBVA y el Banco Sabadell parecía que iba a ser la siguiente gran fusión en fructificar. Es más, a ellos se iba a unir Kutxabank, haciendo que la gran competencia del Santander aumentase considerablemente su volumen de activos.
Algo que no podía permitir la entidad presidida por Ana Botín. Aunque siguen interesados en una gran fusión internacional, para la que hay varios candidatos, en el Santander han pasado al ataque tras la ruptura aparente de negociaciones entre el Sabadell y el BBVA.
Las recomendaciones del BCE inician el ataque del Santander
Los supervisores bancarios quieren entidades fuertes ante el panorama que se presenta en 2021. Los pronósticos auguran baja rentabilidad y un aumento considerable de la morosidad derivado del enorme impacto económico de la pandemia a lo largo de 2020.
Por eso, desde el BCE instan a todos los bancos a buscar fusiones y en el Santander ya han iniciado su ataque al Banco Sabadell, para tratar de llevar esta unión a buen puerto. Desde el BCE han pedido encarecidamente al Santander que reconsidere su estrategia y parece que ese momento ha llegado.