El padre de Cata consigue cerrar su etapa con la policía del Distrito Sur
Gael ya puede respirar con tranquilidad dentro del barrio de Servir y Proteger, al poder saldar sus deudas con la policía. La cual tenía sus dudas sobre su posible relación con el asesino más buscado del Distrito Sur, con el cual aún no han conseguido dar con su paradero.
Mientras tanto, los problemas en la cárcel se están estabilizando, ya que Vega se ha dado de valer por sí misma para hacerse con el poder de las reclusas que seguían a Rebeca. Lo que le ha ayudado a conseguir la lealtad de todas las personas que se encuentran encarceladas.
El dueño del Moonlight consigue limpiar su nombre gracias a la abogada del barrio
Gael, pasa a ser el centro de atención de Servir y Proteger, después de que su novia, la abogada Julia, dejara claro la inocencia de este frente a la policía. Lo que le deja totalmente libre de cargos, separándose así de su supuesta identidad como el Fantasma, uno de los asesinos más buscados.
Aunque no es el único giro de eventos que ha recibido por parte de la vida, puesto que Cata ha conseguido el tercer grado, por lo que ha tenido la oportunidad de salir de la cárcel. Para así finalmente poder encontrarse cara a cara con su padre, para poder conocerlo después de su trágico pasado.
Nuevo punto de mira para la policía del Distrito Sur después de dar con las mentiras de Matías
Mientras tanto Matías pasa a ser el nuevo sospechoso como posible Fantasma, puesto que la policía se ha percatado de las mentiras contadas por el protagonista durante los hechos del primer asesinato. Lo que le convierte en el objetivo principal de Miralles, quien no quita el ojo al médico.
Todo ello llega después de que Miralles se viera gravemente estancada con esta investigación, puesto que no conseguían información sobre el asesino. Para ello, comenzó desde cero volviendo a revisar todos los acontecimientos pasados, dando lugar a su vez con algunas pautas llevadas a cabo por el Fantasma.