La segunda temporada mostrará en acción a uno de los dragones más temidos
House of the Dragon no ha hecho más que comenzar, pero ya sabemos que la segunda temporada estará cargada de acción. Así nos lo dejó entrever el final de la primera entrega, la cual cerró a tan solo un paso de la guerra. Guerra que enfrentará al bando de los verdes, los Hightower, con los negros, los Targaryen. Y como en toda guerra, los aliados y los movimientos estratégicos serán de suma importancia.
De hecho, por lo visto hasta ahora, sabemos que el enfrentamiento entre las dos casas solo ha comenzado en forma de búsqueda de aliados. Por el momento la ventaja la tienen los Hightower, quienes han sumado a su bando a Vhagar, el dragón más grande que participará en la Danza de Dragones, y a la casa Baratheon, a quien no pudo convencer Lucerys antes de morir.
Vermithor, el arma secreto de los Targaryen en House of the Dragon
Tras ver que Aemond se hiciera con Vhagar, que era el dragón más temido de aquel entonces, Daemon comprendió que los dragones jugarían un papel fundamental en la guerra. Y es que estos dragones marcarían la diferencia entre uno y otro bando. Es por eso que se fue en búsqueda de Vermithor, una de las grandes bestias de la época.
Por lo que sabemos, Vermithor es el tercer dragón más grande que hemos visto hasta la fecha. Pero no solo eso, sino que además es uno de los más experimentados, pues tiene una edad aproximada de 100 años. No obstante, tan solo se dejó montar por el rey Jaehaerys hasta que ahora ha vuelto a ser reclamado por Daemon, que parece haberse ganado su favor.
El paso definitivo de Rhaenyra hacia la victoria
Como hemos comentado, el encargado de sumar a Vermithor al bando de los Targaryen fue Daemon, quien apareció en el episodio entrando en una cueva para controlar a la bestia alada. Así lo hizo, de modo que el bando de los negros daba un importante paso para poder derrotar a los Hightower en la Danza de los Dragones.
La superioridad de los Targaryen en cuanto a dragones es notoria, pero poco a poco será recortada. Traiciones y enfrentamientos internos igualarán las fuerzas, de modo que la balanza se equilibrará de nuevo. No obstante, sabemos que tarde o temprano Rhaenyra conseguirá reclamar lo que le pertenece: el Trono de Hierro. Eso sí, su reinado no será tan largo ni fructífero como le hubiera gustado.