La velada quedará para el olvido de los comensales y tendrán que superar el trago amargo en su visita al dating show
Tanto Aday como Carlos Javier, tenían grandes expectativas en su visita a First Dates, y su ilusión era la de encontrar a alguien con quien pasar grandes momentos. Lo cierto es que todo resultó ser muy diferente a lo que ellos imaginaban. La cita no empezó del todo bien, pero aún así tenían ganas de seguir adelante para ver que sucedía.
El primero en llegar fue Aday, un gogó y maquillador quien reconoció que “hay que tener etiquetas porque en el momento que dejen de existir, todo será un caos”. Luego confesó “En mi día a día me maquillo y me visto así, me encanta. Me identifico como un hombre, pero es verdad que me gusta vestir de mujer y maquillarme”.
El mal inicio que marcó la cita entre Aday y Carlos Javier en First Dates
Era el momento de la verdad, la llegada de Carlos Javier fue épica puesto que al ver a Aday, el chico casi se da un buen golpe. Sin embargo sus reflejos le ayudaron a mantenerse en pie. En su presentación comentó. “Me considero un chico muy coqueto, me encanta usar tacones y maquillarme. Aunque también exploto mis otras facetas masculinas”.
En la mesa y mientras cenaban, Aday se percató que su cita y él, eran iguales en cuanto al estilo que tenían. “Somos femeninos, nos gusta ponernos ropa de mujer… por etiquetarlo”. El comentario no cayó para nada bien a Carlos Javier que le discrepó, “Creo que etiquetar es un poco peligroso. Etiquetarse como ropa de hombre o de mujer es absurdo, la ropa no tiene género”.
Lo que empieza mal termina peor, Aday y su cita salieron como una bala del restaurante de First Dates
Con el cruce de opiniones y la mala vibra que se sentía en la mesa, los dos comensales ya presentían como iba a acabar todo. Sin embargo, Aday argumentó que la cita no fue lo que esperaba, pues quería encontrar a alguien más masculino que él, y por supuesto Carlos Javier no cumplía sus expectativas. Por parte del canario, aseguró que no le agradan las personas que etiquetan a otras, y se sienten superiores.
Al término de la velada, ambos se fueron como una bala del restaurante de Cuatro, y Lidia exclamó. “Cuanta prisa tenéis por salir: ¿No os ha gustado estar juntos?”. El maquillador reiteró que la velada fue un total fracaso. ” Se me ha cortado el rollo porque me gustan los chicos masculinos y no eras lo que buscaba”.