Una sola palabra del soltero al final de la cita casi arruina todo el trabajo que los dos comensales hicieron en la velada. Por poco y la química que floreció, las ganas de estar juntos y el gusto mutuo se va a la basura.
En ocasiones pesan más las malas acciones que las buenas, un ejemplo clarísimo fue la afirmación de Fernando a Arantxa al final de su cita en First Dates. Durante toda la velada los dos comensales encontraron puros puntos a favor, y por un momento pensaron que eran almas gemelas. Sin embargo debían seguir conociendo el uno del otro.
Uno de los temas en los que más se entendieron fue el deporte, en especial la hípica. Ella reveló que es muy aficionada y le gusta asistir frecuentemente a los hipódromos. La sorpresa fue mayor cuando el le contó que aunque no practicaba esa misma disciplina, si lo hacia en el polo. Además comentó que tenía muchas fracturas de caídas en caballo.
Otra de las cosas en la que Arantxa y Fernando tuvieron mucho rollo para hablar en First Dates
El tema principal por el que fueron al dating show también resultó un factor en común. Nos referimos al tipo de relación que vienen buscando cuando decidieron aventurarse en First Dates. Tanto Arantxa como Fernando están en la búsqueda de una pareja estable, seria y dispuesta a todo. De hijos no hablaron, pues la gallega tiene dos hijos.
De hecho la chica comentó que fue madre muy joven, y no pudo disfrutar de las mieles del amor sin pensar en las responsabilidades de la maternidad. Ahora que sus hijos están grandes, se quiere dedicar a ella y a su situación sentimental. Algo en lo que el catalán puede ayudarle, si ella le da la oportunidad.
El detalle que casi arruina la velada en First Dates, pero que gracias a la astucia de Fernando pudo salvar
Al principio de la cita y antes de que la chica llegara, Fernando le dijo a Carlos Sobera que no le gustaban las rubias, y justamente Arantxa lo es. Lo que tomó a todos por sorpresa, es que el barcelonés lo fuese a decir al final de la velada, poniendo en riesgo lo el trabajo que hizo para conquistar a la chica.
“No me gustan las rubias” dijo Fernando dejando a Arantxa boquiabierta y algo confundida. No obstante, la astucia del catalán salió a flote y manifestó. “quise decir, no me gustaban las rubias hasta hoy”. La soltera respiraba de alivio mientras que el hombre también lo hacía. Como era de esperar, ambos se dieron el sí, y tendrán una segunda salida para concretar su amor.
