El programa de la famosa trampilla vive un momento para el recuerdo con una respuesta surrealista
Los programas de televisión para que funcionen necesitan tener espectadores fieles cada día. Por eso, no puede triunfar un simple formato de preguntas y respuestas si no se le pone una dosis de picante. Ahí radica el éxito de ¡Ahora caigo! que tiene en los chascarrillos de Arturo Valls una auténtica red salvavidas.
Porque cada tarde, ¡Ahora caigo! congrega a miles de espectadores que disfrutan a lo grande con los personajes tan variopintos que elige Antena 3 para que arriesguen el todo por el todo. Y la mecánica del programa es muy sencilla.
¡Ahora caigo! ya es un clásico
Se trata de un concursante titular, que se debe batir en duelo contra cada uno de los que están en el círculo que rodea el plató. Si logra vencer a todos, va sumando el dinero que deja cada reto y tiene la opción de acertar el bonus final para llevarse el bote.
Y el que queda eliminado ya se sabe, se cae por la trampilla. Pero Arturo Valls más que presentador es animador del público de ¡Ahora caigo! Porque se ríe como quiere de los concursantes y también de algunos espectadores como Palmira.
La burrada de la semana
Pero sobre todo arma el taco cuando un concursante dice alguna burrada fuera de lo normal. Es el caso que ocurrió esta semana, cuando un concursante debía responder a la pregunta de la primera mujer que había desarrollado una profesión concreta en España.
La respuesta era bombera, pero a haber una B y la terminación era, el concursante dijo sin pelos en la lengua que la profesión era bollera. Arturo Valls se quedó sin palabras y no supo muy bien cómo salir al paso para explicar que eso no era una profesión y que sonaba un poco mal.
