El comensal causó expectación entre los espectadores por su fetiche sexual a la hora de encontrarse con su cita en el programa
En cuestiones del amor, cualquier cosa es posible. El restaurante de First Dates nos tiene acostumbrados a sorprendernos con el desarrollo de las variopintas citas de sus comensales que nunca dejan indiferente al espectador. Esta vez el que causó sensaciones de todo menos comunes con Elías, que encontró el amor de la mano de Natalia.
Allí, observamos que Elías acudió a First Dates en busca del amor y lo cierto es que lo consiguió, o al menos eso es lo que se ha visto cuando hizo tan buenas migas con Natalia, su comensal idónea y con la que ha mantenido una estrecha vinculación en esta primera cita, y de la que ella no ha dudado en seguir.
Elías ha llamado la atención en First Dates por su gusto especial por los pies
Elías es un joven venezolano que lleva 7 años en España y trabaja de mantenimiento. Lo curioso viene cuando, en su ficha de presentación de First Dates, ha puesto que le gustan mucho los pies, de hecho le gusta comerlos. Un dato que ha llamado la atención de Carlos Sobera.
En el restaurante ha conocido a Natalia, una quinesióloga de 43 años, que casualmente cuando se estaban tomando el postre y jugando al juego oficial del programa, en una de las tarjetas le ha salido que ella tenía que darle un masaje. Pero Elías le ha dicho que mejor se lo hacía él y la parte del cuerpo que ha elegido Natalia no ha sido otra que los pies.
Porque después de una cena muy al gusto de ambos, tanto Elías como Natalia se divirtieron bastante mientras él le hacía un masaje en los pies a su cita. Lejos de importarle, el venezolano estuvo tan a gusto que no dudó en confesar que esa parte del cuerpo es uno de sus fetiches sexuales favoritos.
Los dos solteros quisieron divertirse dando un masaje a su cita
Al acabar la cena, los dos solteros quisieron ir a un sitio más íntimo. Por este motivo, decidieron abandonar su mesa para estar en una habitación los dos solos. Una vez allí, quisieron divertirse con un juego del programa en el que Elías tenia que coger un papel y cumplir con lo que ponía: en su caso, dar un masaje a su cita.
En ello, lo cierto es que al principio Natalia no estuvo todo lo cómoda que se vio durante la cena, y la razón es que a ella no le gustan sus pies. Ante ello, Elías no dudó en llevarle la contraria reconociendo el fetiche que tiene con esta parte del cuerpo: “Están bonitos. Te lo digo yo que los pies son mi profesión”, reconoció ante las risas de su compañera de velada. Con todo, los dos pusieron rumbo juntos a una segunda cita lejos de First Dates.
