Las anécdotas del soltero son poco creíbles pero él asegura que son 100% verdad, ya que no tiene la necesidad de mentir. Ni reuniendo la vida amorosa de 100 hombres alcanzan en número las relaciones que este ha tenido.
Galán y seductor, tal vez estas dos palabras sean las que mejor describen a Carlos, el comensal de First Dates que vino a ganar sí o sí. El hombre es divorciado pero no mencionó hace cuánto lo es, aunque sí comentó que es padre de 3 hijos. En cuanto a la mujer que viene buscando, no dijo mucho, pues admitió que no es exigente y solo le interesa pasarlo bien.
“No tengo muchas preferencias con mi cita, con que respire, me sobra, ni facha ni tengo nada para ser selectivo. Me gustaría enamorarme de su sonrisa” dijo Carlos. Antes de que su cita llegara al restaurante, contó que había sido baterista en diferentes bandas musicales. “Fui batería con El Fary, Carmen Sevilla, Cordón 4, Rumba Tres…”
La anécdota irreal de Carlos que dejó sin palabras a su cita en First Dates
Como el comensal había comentado que fue un poco ligón en su juventud, aprovechó para dar detalles más específicos. “He sido un poquito ligón y seductor. He estado con 3.722 mujeres, pero todas con amor”. Pero su cita no se quedó atrás. “Me gusta provocar y que los hombres se giren cuando me ven por la calle. Ligo mucho, pero suelo tener relaciones largas que terminan saliendo mal y que me fastidian la vida un poco” dijo Adelina.
La primera vista de ambos no fue recíproca, ya que mientras Carlos decía que le había gustado la veterana mujer, ella dijo que no sintió nada al conocerlo. De hecho en el privado dijo que la manera en como hablaba el sevillano, era un tanto rápida que a veces no le entendía. Lo cierto es que la velada no progresaba y tenía altas probabilidades de estancarse.
Si la primera vista ni resultó bien, la química tampoco, cita destinada al fracaso en First Dates
Si la cita entre Carlos y Adelina fuese un barco, sería sin duda el Titanic. No había manera de salvarla por ningún lado, a pesar de que el andaluz tenía toda la disposición de salir victorioso. Entre los temas de los que hablaron, el soltero le contó que era músico y había estado en Barcelona tocando con Los Manolos. Pero ella lejos de asombrarse, no sabía quiénes eran.
“Igual no los conoce porque es joven o porque está un poco sorda, igual que yo estoy de los ojos” decía el soltero. La hora de la verdad se iba acercando, y ambos ya tenía listo su veredicto. Una vez más estuvieron contrariados ya que mientras el sevillano aceptó que lo pasó bien y por eso quería repetir, ella le contestó que no, pues debía sentir al menos un sentimiento con él cerca, y en toda la velada no sintió nada.