La audiencia crítica al programa y al presentador de La Sexta su doble vara de informar al no contar especialmente la investigación contra Podemos
Siempre se ha achacado la situación polémica del programa de Al Rojo Vivo por el claro posicionamiento de su presentador, Antonio García Ferreras, quien acostumbra apoyar a la izquierda política siempre que puede. No obstante, y a pesar de ello, La Sexta y el programa de actualidad y debate política no ha tratado a todos por igual, como a Unidas Podemos.
O al menos no como se presume Ferreras y su periodismo. Esto viene a partir de las últimas informaciones referidas contra el partido morado, donde se ha conocido que la Fiscalía del Tribunal aprecia indicios de delito en el pago de los servicios que el partido encargó a Neurona Consulting. Sospecha que el contrato pudo ser simulado.
Ni Al Rojo Vivo ni García Ferreras han hecho programas al respecto
Sin embargo, no todas las cadenas hablan de ello. Y menos el espacio de Antonio García-Ferreras, el cual normalmente empiezan por realizar especiales o programas enfocados a polémicas de esta índole. Sin embargo, el presentador de La Sexta se encuentra en estos momentos de vacaciones en la playa…
Y sus colaboradores o sustitutos de Al Rojo Vivo no se encuetran tanto para hacer programas especiales al respecto, que es lo que tanto se critica por parte de la audiencia, que recuerda que con otros partidos políticos el de Ferreras siempre ha puesto el ojo más polémico y serio contra los casos de delitos fiscales.
La Sexta tampoco informó correctamente de las sospechas del fiscal por fraude
Pero no esta vez. Con todo, las informaciones apuntan a que el fiscal ve indicios de fraude electoral y falsedad documental para el partido de Pablo Iglesias, así como también se incitan las sospechas que el contrato pudo ser simulado. En esas, el fiscal pide que la Justicia ordinaria investigue los pagos a Neurona.
Esto dado que el Tribunal de Cuentas carece de las competencias para juzgar estas presuntas infracciones, considerando la Fiscalía que los 290.000 euros facturados a la citada empresa no tienen la consideración de gasto electoral y que, por tanto, no podían ser financiados con subvenciones electorales. Ante ello, ni La Sexta, ni García Ferreras ni Al Rojo Vivo se han movido del sitio.