La colaboradora tuvo que amenazar con irse del plató ante las recurrentes ignoradas
Una situación bastante tensa y muy incomoda se vivió este viernes en el plató de Sálvame, la cual involucró directamente a María Patiño y a su presentador Jorge Javier. Ambos se encontraban debatiendo a cerca de las últimas declaraciones que dio Rocío Flores. No obstante, el catalán se sentó en la palabra y no se la prestaba por nada a la gallega.
Patiño insistía en pedir la palabra a como de lugar, pero el presentador le espetaba. “María, un momento, acabas de venir del Lemon Tea, ¿eh? Hay que repartir un poco el juego, que ya has hablado de cuatro a cinco”. La colaboradora se sintió bastante fastidiada y decidió levantarse de su asiento, quitarse el micrófono, y salir de escena.
La pataleta de María Patiño funcionó en su desespero de tomar la palabra en Sálvame
Al ver que Jorge Javier concedía la palabra a Carmen Alcayde y no a ella (María Patiño) la gallega se levantó y se marchó del plató. De inmediato la colaboradora que tenía el micro se refirió a su compañera. “A mí no me molestas, pero tiene razón en que llevas una hora y ahora vuelves otra vez, cariño. Sin ti esto no es lo mismo”.
Fue David Valldeperas quien se levantó y alcanzó a María para evitar que esta se fuera del programa. Al mismo tiempo empezó a consolarla mientras le decía. “Tienes voz de llorar, María”. Esta le contestaba. “Es que siempre me dices lo mismo y me creas mucha inseguridad”. Luego de ello, Jorge Javier se disculpaba con ella y le volvía a recalcar que no se sentara en la palabra.
María Patiño confiesa que creía estar haciendo las cosas mal en Sálvame
La reacción de la colaboradora no fue ninguna actitud al azar, sino se trataba de un sentimiento oculto que según ella la estaba volviendo loca. “Llevaba unos días con cierta inseguridad, porque había muchas veces que me cortabas. Y yo pensé que realmente lo estaba haciendo mal y me estaba volviendo loca porque hablaba en exceso” confesó Patiño.
El director del programa explicó que dichos cortes no se tratan de minimizar la voz de Patiño, sino que hace parte de la escaleta del programa. “Pero yo le di las explicaciones, que hay una escaleta con unos tiempos, no es porque no sea interesante lo que dices”. Al final, la colaboradora volvió al plató y ya lucía un poco más tranquila y aliviada.