La presentadora de Espejo Público comete un monumental fallo con uno de sus compañeros después de intentar saber si la ropa inteligente funcionaba
Susanna Griso, presentadora de Telecinco, ha protagonizado uno de los momentos más inesperados de Espejo Público, después de tirar un vaso de agua a uno de sus colaboradores. En una de las últimas secciones llevadas a cabo por el programa tuvieron la idea de testificar si realmente funcionaba o no la denominada “ropa inteligente”.
Este momento llega después de la controversia que la presentadora vivió junto al Consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruíz Escudero. Durante la entrevista que le realizó, la conexión se perdió en varios momentos, haciendo que el programa quedara en ridículo. Aunque muchos piensan que no fue una casualidad, si no algo planeado por el espacio.
La ropa inteligente mete en un buen lío a la presentadora Susanna Griso
El pasado miércoles, Espejo Público dio paso a una sección donde se estudiaba si realmente funcionaba la llamada “ropa inteligente”. Fue durante este momento cuando Susanna Griso la lió con uno de sus colaboradores tras tirarle un vaso de agua en los pantalones, la única pieza de su vestimenta que no formaba parte de la ropa inteligente.
Hablaban así de una ropa que con el simple gesto de darle a un botón se calienta automáticamente para no pasar frío. De la misma forma, también cuenta con otros tejidos que permiten que la ropa no se manche. Los colaboradores que ocuparon dicho espacio junto a la presentadora fueron Diego Revuelta y Nando Escribano, en pleno directo.
Susanna Griso pide disculpas a su compañero después de lanzarle un vaso de agua
Este suceso ha sido iniciado con la intervención de Diego, puesto que ha tirado un vaso de agua a su compañero mientras todos quedaban sorprendidos por la acción. Este era consciente de que Nando vestía una camisa inteligente, por lo que no tuvo miedo. Acto seguido también la vertió con kétchup para demostrar que no se manchaba.
Después del suceso con Susanna, la periodista ha pedido perdón a su compañero, mientras todos se reían por lo sucedido. Esto ocurre debido a que solo los colaboradores eran conscientes de que prendas eran inteligentes. El colaborador se lo ha tomado a risa como hemos podido comprobar con una publicación en Instagram, donde ha afirmado que menos mal que ha podido pasar por casa antes de ir a la radio.