Augusto Algueró el único hijo de la actriz española que se lleva todo el patrimonio después de su despedida durante el pasado martes
Carmen Sevilla, icónica actriz, cantante y presentadora de televisión, nos dejó este martes a los 92 años en Madrid. Esta mujer, que dejó una huella imborrable en el cine y la televisión española, también deja tras de sí una considerable fortuna que heredará su único hijo, Augusto Algueró. La carrera de Carmen abarcó varias décadas y se extendió por diferentes medios. Tras alcanzar la fama en la industria del cine, tanto en España como en Hollywood, Carmen tuvo un renacer profesional en 1991 cuando se unió a Telecinco.
Fue la presentadora del Telecupón, un programa que congregaba a millones de espectadores cada noche para disfrutar de su carisma y naturalidad. Durante esa etapa, Carmen compaginó su trabajo en la televisión con su participación en galas donde cantaba y presentaba. Uno de los momentos más recordados de su carrera televisiva fue cuando presentó las Campanadas de 1993 junto a José María Íñigo, protagonizando un célebre gazapo al dar la bienvenida al año 1964 en lugar de 1994.
Fortuna acumulada gracias a una carrera exitosa
Gracias a su larga y exitosa carrera, Carmen Sevilla logró acumular una gran fortuna. Según se recuerda, el primer gran contrato que firmó la actriz fue con el productor Cesáreo González, por el que recibió algo más de un millón de pesetas por tres películas. Durante su matrimonio con Augusto Algueró, la pareja generó importantes cantidades de dinero, convirtiéndose en uno de los matrimonios más adinerados de Madrid. Después de su divorcio, Carmen contrajo matrimonio con Vicente Patuel, propietario de varios cines en la Gran Vía.
La pareja logró mejorar su situación económica tras vender los derechos de su boda a una revista por 40 millones de pesetas. A medida que su carrera en la televisión avanzaba, Carmen continuó amasando su fortuna. Durante sus años en el Telecupón, cobraba 300.000 pesetas mensuales. Más tarde, en Cine de Barrio, su salario aumentó hasta los 24.000 euros semanales.
Un legado de riqueza de Carmen Sevilla
Aparte de sus ingresos profesionales, Carmen también realizó inversiones inteligentes que contribuyeron a su patrimonio. Compró un exclusivo piso en la calle Pintor Rosales, un ático de grandes dimensiones en Marbella e invirtió en joyas y obras de arte. Estas adquisiciones se suman a la considerable fortuna que deja a su único hijo, Augusto Algueró.
En conclusión, Carmen Sevilla no solo fue una de las figuras más queridas y respetadas de la industria del entretenimiento español, sino que también fue una mujer de negocio astuta y exitosa. Su legado, tanto en términos de su contribución al cine y la televisión como de su fortuna, será recordado y apreciado en los años venideros.
