La acusación por la muerte de Leopoldo vuelve a dar un giro al encontrar un detalle sospechoso en su móvil
Servir y proteger continua emitiendo episodios en la cadena pública nacional a pesar del estado de alarma. Y es que la productora de la serie tenía ya bastante capítulos grabados como para surtir a su audiencia estos días de parón. Esto está siendo muy beneficioso para ellos, ya que cada día son miles las personas que siguen todos los entresijos de las vidas de Ramón Rojo, Mateo, Verónica, la inspectora Miralles, entre otros. Además, la producción siempre encuentra algún suceso para dejar en vilo a sus fans.
Como por ejemplo con la muerte de Leopoldo en el bar La Parra, que deja tras de sí multitud de incógnitas que tendrán que ir descubriendo. En un primer momento, la principal sospechosa de su muerte ha sido Lucía, su viuda. Y es que era la que tenía una relación directa con el paciente de Antonio y muchos detalles la señalaron como posible culpable. Pero no contentos con eso, en el interrogatorio descubrieron que esta tenía un amante.
Esto hace que salten todas las alarmas, pero Servir y proteger vuelve a dar un giro de 180º cuando de repente el hijo de Leopoldo se pone en el foco de todas las miradas. Y es que tras la revisión del móvil del fallecido, encuentran un detalle que incrimina de lleno a su hijo. Quizás esto hará que Lucía pueda salir del calabozo.
Por otro lado, la historia de Toni y Verónica parece que se está afianzando. Y es que con la llegada del marido de esta a Distrito Sur, el joven policía está muy ilusionado con que ella hablará con su marido y romperán la relación. Pero esto Verónica no lo tiene del todo claro, ya que no encuentra el momento perfecto para tener esa charla definitiva.
Por su parte, Toni continúa con la investigación junto a Merche de la muerte de Leopoldo. Él es el que encuentra algo sospechoso en el móvil del fallecido que incrimina directamente a su hijo, por lo que su vida no está pasando por el mejor momento ni personal ni profesional.