La ganadora de GH VIP 7 se reencuentra con su ex pareja para arreglar la custodia del hijo que tienen en común
Tras finalizar Supervivientes 2020 y Hugo regresar a casa, Adara ha tenido que tomar una drástica decisión y volver a Palma de Mallorca con su hijo. Abandonando así el hogar que había compartido en Madrid junto a Gianmarco Onestini, una relación que terminó con un final devastador por ambas partes. Ahora, la ganadora de GH VIP 7 debe afrontar una serie de cambios.
Adara ha vuelto a Palma de Mallorca para arreglar algunos papeles de la custodia del hijo que tiene en común con Hugo Sierra. Este momento no era nada agradable para Adara, ya que no quería volver a Palma de Mallorca y prefería quedarse en Madrid. En estos días hemos visto en su perfil de Instagram la mudanza.
El reencuentro más esperado
El pasado fin de semana tuvo lugar el reencuentro de Adara y Hugo en el complejo La Cigüeña. El motivo por el que se produjo este hecho fue porque el padre del hijo de Adara quería reencontrarse con su pequeño. Así, Adara también pudo visitar a su madre, Elena, que también había participado en el concurso.
Otro de los colaboradores de Supervivientes, que también estuvo presente en el momento del reencuentro entre Adara y Hugo, fue Antonio David Flores, que se encontraba allí puesto que es el padre de Rocío Flores, otra de las concursante del reality de Supervivientes 2020.
El padre de Rocío ha comentado como fue el reencuentro entre Adara y Hugo, afirmando que estuvo muy cariñoso y divertido con su hijo. Además, comentó que Hugo recibió muy bien a Adara y que incluso caminaron hablando sobre temas que tienen en común en estos momentos, entre ellos la custodia del niño.
Los cambios necesarios
Adara ha comentado en alguna ocasión que es necesario que exista paz entre Hugo y ella, ya que debería hacer todo lo posible por el hijo que tienen en común. A partir de ahora, la ganadora de GH VIP 7 ha confesado que le encantaría tener buena relación con el padre de su hijo y dejar atrás el dolor.
Aún no sabemos que pasará finalmente, lo que si vemos es predisposición por ambas partes. Por ahora, Adara ha tenido que mudarse a Palma de Mallorca, dejando su vida de Madrid, hasta que las cosas vayan mejorando y pueda arreglar los papeles del niño. Tendremos que estar atentos para ver qué va pasando.
