El contraataque protagonizado por el ejército de Ucrania ha dejado sin palabras al líder de Rusia el cual no sabe cómo contestar a las amenazas
El pasado lunes se vivieron momentos de tensión entre Rusia y Ucrania, concretamente en Belgorod por la contraofensiva ucraniana que ha dejado a Putin sin saber cómo responder. Así mismo, como ocurre continuamente, las versiones de ambos bandos chocan entre sí, dando pares y nones sobre los responsables de la escalada de tensión en dicho punto estratégico. De la misma forma, Kiev afirma que este mismo suceso podría darse en otras regiones rusas.
Ahora toda la atención de la continuidad de la contraofensiva ucraniana se fija en Briansk, Kursk y Voronezh. Todo ello debido a la gran cantidad de ciudadanos que están en contra del régimen ruso lo cual podría desembocar en un levantamiento que dificultara la situación actual de tensión entre ambos países. Otra vez más se muestra que el enfrentamiento está aún muy lejos de terminar.
Ucrania se hace con el control de la batalla en Baimu
El cambio en la historia actual ha permitido que Ucrania se haga con el control de parte de la batalla, dejando un poco de lado las habladurías de la victoria rusa en Baimut. Esta nueva victoria para Kiev significa un punto estratégico ya que expone un hueco en las líneas defensivas creadas por Rusia. De esta forma se muestra un territorio desprotegido por el ejército ruso.
Ahora, se han visto obligados a reunir fuerzas para acabar con todos los puntos débiles que han dejado expuestos al enemigo. Por ello, Rusia hizo un ataque rápido en contra de Ucrania afirmando que había derrotado a todos aquellos responsables de los ataques que habían tenido lugar en Belgorod. Así mismo ha acabado con la vida de más de 70 personas, que ellos mismos tachan como terroristas.
El Kremlin ve una razón más para seguir con la ofensiva
Estos nuevos hechos le dan una razón más al Kremlin para seguir con la ofensiva que se ha comenzado en Ucrania, como parte de una operación especial para salvar a la población. Así es como lo han denominado durante todo el año, donde Putin y Zelensky no han parado de culparse mutuamente de todos los sucesos que estaban ocurriendo. Además de incluir a todos los aliados de ambas partes.
Hasta el momento, la tensión sigue en crecimiento, mientras que la posibilidad de frenar la guerra aún se queda a la distancia. Por ahora, el líder de China está haciendo de puente entre ambas partes como forma de lidiar y rebajar las tensiones para mejorar la comunicación. Siendo así un punto clave en toda esta situación que se ha descontrolado desde el año pasado.